Erdogan: Estado de emergencia para vencer al “virus” terrorista del golpe de Estado fallido

El estado de emergencia durará tres meses. Quedan suspendidos los derechos de asamblea, de publicación, difusión, movimiento. Fueron despedidos veinte mil docentes. Según Erdogan, la dirección del tentativo de golpe de Estado debe ser atribuida a Fethullah Guelen y a “otros Estados”.

Ankara (AsiaNews)- El presidente Recep Tayyip Erdogan declaró anoche que el estado de emergencia se prolongará por tres meses, prometiendo vencer a “todos los virus presentes en las fuerzas armadas” que el 15 de julio intentaron un golpe de Estado, que fue frustrado en cuestion de pocas horas.

Hablando desde el palacio presidencial de Ankara, Erdogan declaró que el estado de emergencia es necesario “para eliminar rápidamente todos los elementos de la organización terrorista que intentó dar el golpe de Estado”. Luego hizo un elenco de todas las reglas de emergencia, que fueron publicadas hoy en el Boletín oficial.

En la lista encontramos 15 prohibiciones y limitaciones, entre ellas: la restricción o prohibición a reunirse en las calles, el toque de queda en ciertos períodos, la prohibición de publicar, copiar, y difundir material ilegal; el derecho de allanar lugares o controlar a las personas por parte de las fuerzas del orden; la reglamentación de asambleas -que se realizarán en lugares cerrados y en horarios establecidos-; la posibilidad de alejar de sus puestos de trabajo a las personas cuya situación contradiga la ética.

Es probable que la declaración del estado de emergencia hará que se incremente el número de detenidos (que hasta ahora es de cuando menos de diez mil) y también de los arrestos. Mientras tanto, además del arresto a generales y almirantes, más de 600 escuelas fueron cerradas y veinte mil docentes fueron despedidos.

Desde un inicio, el presidente denunció al imán Fethullah Gülen como el inspirador del golpe de Estado, y pidió a los EEUU -donde se encuentra Gülen, exiliado de manera voluntaria- que él sea extraditado a Turquía. En una declaración pública, Gülen calificó como “ridícula” la acusación de que estaría detrás del fallido golpe de Estado.

Ante los medios, Erdogan denunció que también hay responsabilidades de “otros Estados” en el hecho. Pero la impresión de todos es que el único que gana, en este tentativo de subversión abortado, no es otro que Erdogan mismo.