Jóvenes, migrantes y mártires: el Jubileo en Corea

Las diócesis de la península abrieron las Puertas Santas de las catedrales. En Daejeon y Suwon el Año Santo involucra los santuarios de los mártires de las persecución anti-cristiana. En Seúl, una "maratón" de confesiones para los jóvenes en el exterior de la iglesia de Myeongdong. Presidente de Justicia y Paz: “Si te humillas, entonces y sólo entonces el Espíritu Santo te colma con Su gracia”.

Seúl (AsiaNews) – El Jubileo de Corea del Sur “tiene tres rostros: el de los mártires, el de los jóvenes y el de los migrantes. A través de su testimonio, podemos crecer en la fe, ellos deben ser los primeros destinatarios de la misericordia de Dios”. Quien lo dice en diálogo con Asia News es Mons. Lazzaro You Heung-sik, obispo de Daejeon y presidente de la Comisión Episcopal Justicia y Paz, en ocasión del inicio del Jubileo en las diócesis.

Su catedral, dedicada a San José Obrero, hizo la apertura de la Puerta Santa junto a las catedrales del resto del mundo, el pasado 13 de diciembre: “La misericordia de Dios es el rostro de la Iglesia, criterio de fidelidad al Señor. Y sobre todo para los cristianos: el mundo precisa del perdón y la reconciliación. Espero que el Jubileo pueda cambiar a Corea. Es un tiempo de gracia del cual tenemos necesidad”.

La diócesis de Daejeon es la “cuna” de los grandes mártires coreanos, que dieron la vida por el Evangelio: “Es por eso que [hoy,ndr] hemos abierto también tres Puertas Santas especiales, que están precisamente en sitios de su martirio. Entre ellos están también Solmoe y Haemi, que fueron visitados por el Papa Francisco durante su visita apostólica en el verano de 2014. Aquí están sepultados los mártires que han pagado a los guardias para ser ajusticiados el Viernes Santo y no en el día de Pascua, como estaba previsto. Son ejemplos que debemos tener siempre en el corazón”.

Otro aspecto improtante del Jubileo coreano está vinculado a la cuestión de los migrantes. En la diócesis de Suwon, según cuenta el Padre Maurizio Giorgianni OMI, “la comisión para la migración decidió organizar una peregrinación para los inmigrantes, para que puedan vivir mejor el Año Santo. El 7 de diciembre lo anuncié a los migrantes de mi centro: iremos donde los mártires para recibir la misericordia pero también para ser portadores de misericordia para los demás. Espero que logremos llevar a cabo esta peregrinación el domingo de la Divina Misericordia, el primero después de Pascua. No podría imaginar una fecha mejor”.

El Adviento, sigue explicando el Padre Giorgianni, “es el momento en el cual la misericordia de Dios se vuelve más cercana a nosotros. Ayer vinieron algunos migrantes y me dijeorn que querían confesarse el sábado próximo: algo particular para ellos. El Papa ve más allá de nosotros, porque de la manera en que se encuentra hoy el mundo, hay verdadera necesidad de gestos de misericordia. Sobre todo de recibir misericordia, porque así estamos en grado de tenerla”.

Todos los coreanos, retoma Mons. You, “están contentos por el Papa. Pero amarlo significa acoger sus palabras y su actitud, y hacerlas nuestras. Demasiadas veces, en cambio, se usan las palabras de Francisco para juzgar a los demás. Pero este no es el pensamiento justo. Cada uno toma a su manera las indicaciones del pontífice, y esto no está bien. El cristianismo no es una religión de naturaleza ‘solitaria’, sino que enseña una vida comunitaria a imagen de la Trinidad. Es un desafío, una aventura en la cual tratamos de vencer”.

En la capital, Seúl, la Puerta Santa fue abierta por el Card. Andrea Yeom Soo-jung, en la catedral de Myeongdong. El próximo 23 de febrero de 2016, a su vez, serán abiertas las Puertas de los santuarios arquidiocesanos de Saenamteo y Seosomun. En la tarde del 18 de diciembre, 30 grandes tiendas serán levantadas frente a la iglesia principal, para que los jóvenes puedan confesarse antes de atravesar la Puerta Santa.