Pueblos indígenas, la Iglesia repudia la 'doctrina del descubrimiento'
En una nota conjunta de los dicasterios de Cultura y Desarrollo Humano Integral, la condena de los documentos de la época de la conquista colonial. Durante el viaje del Papa Francisco a Canadá, los indígenas recordaron que estos habían sido utilizados para justificar el despojo de sus tierras. “Que se protejan los derechos de los pueblos indígenas y se facilite su desarrollo respetando su identidad, lengua y cultura”.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- La “doctrina del descubrimiento” no forma parte de la enseñanza de la Iglesia católica. Así dice una nota oficial conjunta de los departamentos de Cultura y Educación y Desarrollo Humano Integral que publicó hoy el Vaticano. El texto, que responde a un pedido de los nativos durante el viaje apostólico de Francisco a Canadá, condena abiertamente el uso de algunas bulas papales en la época colonial para despojar a la población indígena de sus tierras. Pero también se convirtió en una ocasión para que la Iglesia Católica renovara su pedido de perdón por los "terribles efectos de las políticas de asimilación y el dolor que experimentaron los pueblos indígenas", y sobre todo para recordar que la implementación de los principios contenidos en la Declaración de la ONU sobre Derechos de los pueblos indígenas es un desafío más actual que nunca.
“A lo largo de la historia -recuerda el texto- los Papas han condenado actos de violencia, opresión, injusticia social y esclavitud, incluyendo los que se cometieron contra los pueblos indígenas. Hubo numerosos ejemplos de obispos, sacerdotes, religiosos, religiosas y fieles laicos que dieron su vida en defensa de la dignidad de esos pueblos”. Pero también hubo muchos cristianos que "cometieron actos perversos contra los pueblos indígenas por los que los últimos Papas han pedido perdón en numerosas ocasiones".
El documento recuerda que gracias a la ayuda de las poblaciones indígenas “la Iglesia adquirió mayor conciencia de su sufrimiento, pasado y presente, por la expropiación de sus tierras, que consideran un don sagrado de Dios y de sus antepasados, y de la de la asimilación forzosa, promovida por las autoridades gubernamentales de la época, que tendía a eliminar sus culturas indígenas”. Y fue precisamente en ese contexto que sintió la importancia de abordar el tema de la "doctrina del descubrimiento", que a partir del siglo XVI y después de manera aún más marcada en la jurisprudencia del siglo XIX otorgaba a los colonos el "derecho" a anular, por compra o conquista, el título de propiedad de las tierras por parte de los pueblos indígenas.
“Algunos estudiosos -explica la nota- han argumentado que la base de la mencionada 'doctrina' se encuentra en varios documentos papales, como las bulas Dum Diversas (1452), Romanus Pontifex (1455) e Inter Caetera (1493). La investigación histórica demuestra claramente que los documentos papales en cuestión, escritos en un período histórico específico y relacionados con cuestiones políticas, nunca fueron considerados expresiones de la fe católica. Al mismo tiempo, la Iglesia reconoce que estas bulas papales no reflejaron adecuadamente la igualdad de dignidad y derechos de los pueblos indígenas. La Iglesia también es consciente de que el contenido de estos documentos fue manipulado con fines políticos por las potencias coloniales que competían entre sí para justificar actos inmorales contra los pueblos indígenas, que a veces se realizaban sin la oposición de las autoridades eclesiásticas".
“Es justo reconocer estos errores -comenta-, reconocer los terribles efectos de las políticas de asimilación y el dolor que vivieron los pueblos indígenas, y pedir perdón. Por lo tanto, la Iglesia Católica repudia aquellos conceptos que no reconocen los derechos humanos inherentes a los pueblos indígenas, incluyendo lo que se ha llegado a conocer legal y políticamente como la 'doctrina del descubrimiento'".
Pero más que sobre el pasado, la cuestión hoy debe leerse a la luz de los desafíos del mundo actual. Por ello, la nota concluye recordando que “la solidaridad de la Iglesia con los pueblos indígenas dio lugar al firme apoyo de la Santa Sede a los principios contenidos en la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas. La implementación de estos principios mejoraría las condiciones de vida y ayudaría a proteger los derechos de los pueblos indígenas, además de facilitar su desarrollo en el respeto de su identidad, lengua y cultura”.
17/12/2016 13:14