Papa hoy, tal vez más que nunca, los cristianos, al igual que los profetas, son perseguidos
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - Siempre los profetas, los que anuncian el evangelio han sido perseguidos, incluso dentro de la Iglesia, y "tal vez hay tantos o más mártires ahora que en los primeros días". El Papa Francisco dijo en su homilía de la misa celebrada esta mañana en la Casa Santa Marta, al comentar el pasaje del libro de la Sabiduría, donde dice: "Tendemos sólo trampas...".
El
Papa, informa de Radio Vaticano, señaló que incluso los enemigos de Jesús
tienden trampas, trabajan "calumniando, privando de la fama". Es
como preparar "el caldo para destruir al justo". y
esto porque se opone a sus acciones, "critica las fallas en contra de las
leyes", el "nos acusa de delitos contra la educación recibida". En
toda la historia de la salvación "los profetas fueron perseguidos", y
el mismo Jesús dice a los fariseos. Siempre
"en la historia de la salvación, en el tiempo de Israel, incluso en la
Iglesia, fueron perseguidos los profetas". Los
profetas fueron perseguidos porque dicen: "¡Vais por la calle equivocada! ¡Regresen
al camino de Dios!". Y
que " a las personas que tienen el poder del mal camino no les gusta".
"El
evangelio de hoy es claro, ¿no? Jesús se ocultaba en estos últimos días, porque
todavía no había llegado su hora, pero sabía lo que sería su fin, cómo sería su
fin. Jesús es perseguido desde el inicio: recuerdo cuando al principio de su
predicación regresa a su país, va a la sinagoga a predicar, e inmediatamente
después de una gran admiración empiezan: 'Pero éste sabemos de dónde es, este
es uno de nosotros, ¿con qué autoridad viene para
enseñarnos? ¿Dónde ha estudiado?'. ¡Lo descalifican! Es el mismo discurso, ¿no? '¡Pero sabemos de dónde
es! ¡El Cristo, por el contrario, cuando nadie sabe de dónde es! '. ¡Descalificar
al Señor, descalificar al profeta para eliminar la autoridad! ". Descalificarlo
"porque Jesús salió y hacia salir de ese ambiente religioso cerrado, de
esa jaula".
El
profeta "luchar contra la gente que encajona el Espíritu Santo. Y por esto
perseguido:¡Siempre !". Los profetas "son todos perseguidos o
incomprendidos, dejados a un lado. ¡No le dan lugar!". Esta
situación no ha terminado "con la muerte y resurrección de Jesús: ¡continúa
en la Iglesia! Perseguido desde fuera y por perseguida por dentro". Cuando
leemos las vidas de los santos "¡cuánta incomprensión, cuánta persecución han
sufrido los santos!", "¡porque eran profetas". "También
muchos pensadores de la Iglesia fueron perseguidos. Creo que uno, ahora, en este
momento, no tan lejos de nosotros, un hombre de buena voluntad, un profeta en
efecto, que con sus libros reprochó a la Iglesia alejarse del camino del Señor.
Inmediatamente ha sido llamado, sus libros han ido al índice, lo han alejado de
la cátedra y así este hombre termina su vida: no hace mucho tiempo. ¡Ha pasado
el tiempo y hoy es beato!: pero ¿cómo ayer era
un hereje y hoy es una beato? Es que ayer quienes tenían el poder querían
silenciarlo porque no le gustó lo que decía. Hoy la Iglesia, que gracias a Dios
sabe arrepentirse, dice. 'No, ¡este hombre es bueno!'. Además, está en el
camino de la santidad: ¡es un beato!".
"Toda
la gente que el Espíritu Santo escoge para decir la verdad al pueblo de Dios -
añadió - sufre persecución". Y Jesús "es sólo
el modelo, el icono". El
Señor tomó sobre sí " todas las persecuciones de su pueblo". Y aún hoy,
"los cristianos son perseguidos". "Me
atrevo a decir que tal vez hay tantos o más mártires ahora que en los primeros
días", "porque en esta sociedad mundana, en esta sociedad un poco tranquila,
que no quiere problemas, dicen la verdad, anuncian a Jesucristo". "¡Pero
existe la pena de muerte o encarcelamiento por tener el Evangelio en el hogar,
por enseñar el catecismo, en la actualidad, en algunas partes! Me decía un
católico de esos países que no pueden orar juntos. Está prohibido. Sólo se puede
orar a solas y escondido. Pero quieren celebrar la Eucaristía y ¿cómo lo hacen?
Ellos hacen una fiesta de cumpleaños, pretenden celebrar el cumpleaños allí y
hacen la Eucaristía, antes de la fiesta. ¡Y es un suceso! - cuando ven que
viene la
policía, sólo esconden todo y ' Felicidaciones, felicitaciones ¡Enhorabuena! ' y
continúan con la fiesta. Después, cuando se van, se terminará la Eucaristía. Así
tienen que hacer, porque está prohibido rezar juntos. ¡Hoy!".
Y
esta historia de persecución "es el camino del Señor, es el camino de los
que siguen al Señor". Sin
embargo, "termina al final, de nuevo, como al Señor, con una resurrección,
¡pero a través de la Cruz!". Francisco
ha, entonces, vuelto el pensamiento al padre Matteo Ricci, evangelizador de
China, que "no era comprendido, no era entendido. ¡Pero él obedeció como
Jesús! ". Siempre "¡habrán persecuciones, incomprensiones! Pero Jesús
es el Señor y este el reto y la cruz de nuestra fe". Que
el Señor, concluyó el Papa, " nos dé la gracia para seguir su camino, y si
ocurre incluso con la cruz de la persecución".
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