Obispos indios de fiesta: Finalmente la Corte suprema escucha a los cristianos dalit

La petición esperaba ser examinada desde 2004. Mons. Sarat Chandra Nayak: “La cuestión de los dalit cristianos está conectada en lo profundo a la misión de la Iglesia católica”. La Iglesia “existe para continuar la verdadera misión de Cristo, mandado para anunciar a lo pobres un mensaje alegre”.

Nueva Delhi (AsiaNews)- El hecho que la Corte suprema acepte finalmente escuchar el pedido de los cristianos dalit “es una buena noticia”. Lo afirma a AsiaNews, Mons. Sarat Chandra Nayak, presidente de la Oficina para los dalit y las castas desventajadas de la Conferencia episcopal india (CBCI). Él se alegra al conocer que los los supremos jueces aceptaron la petición presentada por la Iglesia en la cual se pide la inclusión de los dalit cristianos en las cuotas de puestos de trabajo y de instrucción. La petición recuerda, fue presentada en 2004: “En casi 20 años hemos usado todos los medios democráticos y no violentos posibles en esta batalla continua, a veces descuentan la violencia brutal del poder estatal. Ya en nuestras esperanzas residen en la Corte suprema. Rezamos por los jueces y por nosotros mismos”.

Desde hace años las autoridades eclesiásticas piden la revisión de una Orden presidencial de 1950 que excluye a los que están fuera de casta convertidos al cristianismo de los puestos de trabajo en los trabajos públicos, mientras que incluye a los dalit hindú, sijs y budistas. Para Mons. Sarat, la Orden “es ante todo inconstitucional, porque viola los derechos fundamentales sancionados por la Constitución en los Art. 14,15, 16(2), 29”. Se trata de las normas que establecen: igualdad frente a la ley; prohibición de discriminación en base a religión, raza, casta, sexo o lugar de nacimiento, igualdad de oportunidades en el público empleo; protección de los intereses de las minorías.

En segundo lugar, continúa, el dictado presidencial “es discriminatorio porque excluye en dalit cristianos sobre la base de la religión, en tercer lugar es injusto porque trata a los iguales-los dalit de cualquier religión- en manera desigual; cuarto, es contra la naturaleza laica de la Constitución, porque favorece a los dalit hindúes y budistas y con esto promueve en manera directa al hinduismo, sijismo y budismo”.

En India los cristianos representan el 2,3% de la población, o sea 27,8 millones sobre un total de 1,3 millardos. De éstos, casi el 1,6% es dalit, o sea 18 millones. Según el prelado, “por demasiado tiempo ellos sufrieron la injusticia. Fueron privados de la igualdad legal en base del Prevention of Atrocity Against Scheduled Castes and Scheduled Tribes Act de 1989. Miles de jóvenes instruidos entre los dalit cristianos no obtengan los puestos estatales, “ellos no pueden ni participar en el proceso de desarrollo del país ni sacar beneficio de los planes de desarrollo del gobierno”.

El presidente de la Oficina de los obispos declara: “No yo, sino millones de dalit cristianos y aquellos que trabajan por equidad y justicia, esperan con ansia el juicio positivo de la Corte suprema. Me espero que las mentes de los reverendos jueces estén privadas de cualquier medio, su conciencia esté libre de cualquier prejuicio, tengan alta la cabeza sobre los fragmentos y de las divisiones de la sociedad, sus motivos sean claros y las palabras de su juicio provengan de los profundo de la verdad que conduce a la libertad del Reino de Dios”.

Mons. Sarat subraya que “la cuestión de los dalit cristianos está conectada en manera orgánica con la misión de la Iglesia católica en India. Sin ella, arriesgaría faltar a su misión, perder el catolicismo mismo y renunciar a la propia razón y derecho de existir en cuanto Iglesia. No sólo porque, en cuanto a número, los dalit cristianos representan los dos tercios de los cristianos de India o porque los dalit cristianos constituyen el 17% del total de la población india. Sino porque la Iglesia existe para continuar la verdadera misión de Cristo, ‘consagrado con la unción y el mandato para anunciar a los pobres un alegre mensaje, para proclamar a los prisioneros la liberación y a los ciegos de la vista; para poner en libertad a los oprimidos y predicar un año de gracia del Señor’ (Lc 4,18)”.

Teniendo en mente el punto central de la misión de la Iglesia, el obispo evidencia que la Oficina por él dirigida “asumió la guía en la lucha por los dalit, ya sea por su derecho a vivir como ciudadanos ya sea por su igualdad y ecuas oportunidades dentro de la Iglesia como propios miembros”. Desde aquí en el año 2016 nació el plan de acción para los dalit promovido por la Oficina para las castas desventajadas de la CBCI. “La finalidad-concluye- es realizar la igualdad de la dignidad d todos en cuanto hijos de Dios, la ecua llamada a la santidad y la igual misión de manifestar a Cristo”. (A.C.F.)