Navidad de esperanza, la virtud que nos lleva más allá de todo mal
El saludo del director editorial P. Gianni Criveller a los lectores de AsiaNews en la fiesta que este año inaugura el Jubileo. “Estamos cerca de las comunidades cristianas de Asia que viven estos días como una oportunidad de evangelización. En un mundo marcado por las guerras y la opresión, seguimos dirigiendo nuestra mirada hacia Oriente, donde nace el sol que ilumina y calienta nuestras vidas: Jesús".
Queridos lectores y lectoras de AsiaNews,
nuestra agencia vive intensamente los días y semanas de las fiestas de la Navidad y el comienzo del nuevo año. En efecto, estamos cerca de las comunidades cristianas de Asia, que viven estos días como una oportunidad de evangelización. Aún en los países donde no se celebra como una fiesta pública, como en China, “el espíritu de la Navidad” impregna toda la sociedad. Creo que incluso el aspecto comercial y romántico es una invitación para que muchos se pregunten de dónde viene esta fiesta tan hermosa. En las noches de Navidad que pasé en China, incluso una inolvidable en la gélida Beijing, las iglesias católicas eran visitadas por largas colas de gente helada y curiosa. No eran creyentes, sino ciudadanos atraídos por la atmósfera amable y acogedora que puede crear la Navidad.
Desde Gaza hasta Myanmar, pasando por otros territorios del inmenso continente asiático, Líbano, Israel, Yemen, seguirá siendo una Navidad de dolor. La Navidad también será triste y angustiosa para aquellos que, en la ciudad de Hong Kong, están en la cárcel, privados del bien de la libertad, porque creyeron en la libertad. En el cielo de Belén los ángeles anunciaron la paz: ¿cómo es posible seguir esperando, en un mundo de guerras y opresiones?
Con la apertura de la Puerta Santa, el Papa Francisco inaugura hoy el Jubileo de la Esperanza. La esperanza es una niña “que vino al mundo el día de Navidad del año pasado”, como escribió el poeta Charles Peguy. Es precisamente la niña llamada esperanza la que arrastra consigo por los caminos del mundo a sus dos hermanas mayores: la fe y la caridad. Aunque nuestra fe y nuestra caridad se ven sacudidas por el mal en el mundo, no podemos perder la esperanza: por eso, aunque ella es la hermana menor, es la más importante.
Feliz Navidad y un feliz año jubilar 2025 de paz y esperanza. Seguiremos cumpliendo nuestra misión de informar y reflexionar sobre los acontecimientos de los pueblos y comunidades cristianas de Asia. Sigamos dirigiendo nuestra mirada hacia Oriente, porque es precisamente allí donde sale el sol que ilumina y calienta nuestra vida, Jesús, el Príncipe de la paz.
La imagen que acompaña este saludo es un detalle de la acuarela Virgen con el Niño, pintada en 1941 por el pintor chino Huang Ruilong. La obra forma parte de la colección del Museo Pueblos y Culturas del Centro Misionero del PIME de Milán.
23/12/2015
26/12/2018 12:44