Máxima tensión en Pakistán por la sentencia de gracia para el asesino de Salman Taseer
La decisión del presidente Mamnoon Hussain se la espera en los próximos días. Él debe decidir si acepta o rechaza la apelación de la gracia presentada por los abogados de Mumtaz Qadri. La familia presidencial teme retorsiones y se refugia en la residencia oficial. Uno de los tres hijos recientemente escapó a un atentado. La policía está preparada para elevar el nivel de alerta en todo el país y revisar todo el sistema de seguridad en Islamabad.
Islamabad (AsiaNews)- El nivel de tensión en Pakistán subió a los máximos niveles, con las fuerzas de seguridad en alerta para revisar todo el sistema de defensa de la capital. Para los próximos días se espera la decisión del presidente Mamnoon Hussain que debe expresar su decisión sobre la condena a muerte de Mamnoon Qadri, el asesino confeso del ex gobernador del Punjab, Salman Taseer y conceder o no la gracia. Los expertos temen que se desencadene la violencia de los radicales islámicos en el caso se confirme la condena a muerte. Mientras tanto en los días pasados los miembros de la familia del presidente- entre los cuales uno de los tres hijos que escapó a un atentado-, por miedo de posibles retorsiones han abandonado sus propias casas y se refugiaron en el palacio presidencial.
La decisión del presidente Hussain será la primera que se decidirá después de un largo recorrido judicial y siempre marcado por amenazas. Sólo hace algunos días el profesor Ibrahim, ex emir provincial de Jamaat-e-Islami (partido confesional islámico), amenazó retorsiones contra el gobierno si Qadri no será liberado inmediatamente. El líder islámico puso en guardia al presidente y al Premier Nawaz Sharif: “Protéjanse de la cólera del pueblo”.
El 4 de enero, Qadri uno de los guardaespaldas de Tasser, mató gobernador a la salida de un restaurante de Islamabad, por sus posiciones contrarias a la ley sobre blasfemia, que prevé la cárcel a cadena perpetua o la condena a muerte a cuantos profanen el Corán o profanen el nombre del profeta Mahoma. El hombre siempre reivindicó la paternidad del homicidio y de querer castigar al gobernador, que se había expresado en favor de Asia Bibi, la madre cristiana detenida con la acusación de haber ofendido al Profeta. Por esto fue exaltado como “héroe nacional” por parte de los islámicos.
La defensa de Qadri sostuvo que el caso debiese pasar a manos de la Corte federal de la sharia, porque el delito cometido por el asistido tiene que ver con el islam y su defensa. Los abogados han subrayado que el imputado asesinó a Taseer porque éste último se expresó contra la ley sobre la blasfemia definiéndola como “ley negra” y por lo tanto, se lo debía considerar como un blasfemo.
En octubre de 2011, Qadri fue condenado a muerte en primer grado por el Tribunal antiterrorismo pakistaní. En febrero de 2015 la Alta corte de Islamabad ha confirmado la decisión, subrayando que “nada puede justificar el homicidio de la víctima”. Los abogados han recurrido a la Corte suprema del Pakistan, que en octubre del mismo año rechazó el pedido de absolución.
La última esperanza de ver salvada la vida reside en la decisión del presidente Hussain. Sobre él los seguidores del terrorista están presionando fuertemente, pero no se les escapa ninguna indiscreción. Mientras tanto los rígidos protocolos de seguridad alrededor de la persona del presidente aumentaron aún más y su familia fue recluida en la residencia de Estado. Salman Mamnoon, uno de los hijos, en mayo de 2015 fue objetivo de un ataque con dinamita cerca de Karachi, pero resultó indemne.
29/02/2016 12:47