Manila: lenguas locales en peligro por la reforma educativa
La Republican Act 12027 que entró en vigor hace pocos días privilegia el tagalo como idioma nacional (junto con el inglés, que ya es la verdadera lengua franca) desde los primeros años de la escuela. Preocupación de las poblaciones aborígenes en un archipiélago de más de 7.000 islas que cuenta con 182 grupos étnico-lingüísticos registrados.
Manila (AsiaNews) - El 10 de octubre, en medio del silencio del presidente Ferdinand Marcos, al que muchos habían pedido que suspendiera el proceso de implementación de la medida, entró en vigor la ley que revisa y de hecho limita el estudio de las lenguas maternas locales en el sistema educativo desde la guardería hasta el tercer grado de primaria. En estos días se empiezan a ver las reacciones de aquellos que temen que se haya puesto en marcha un proceso que pueda llevar a la extinción de estas lenguas. En este archipiélago de más de 7.000 islas hay 182 grupos étnico-lingüísticos registrados, en parte poblaciones aborígenes, en parte resultado de conquistas o movimientos de población. La desaparición de estas lenguas atentaría contra un elemento esencial de la diversidad cultural, que es una de las mayores riquezas y atractivos del país.
La Republican Act 12027 en realidad hace que el uso de lenguas minoritarias sea opcional. Pero la presión para que se use el filipino - basado en el tagalo de la zona de la capital - como elemento de unidad nacional y herramienta esencial de la administración, si no va acompañado por instrumentos lingüísticos propios de las diferentes regiones y grupos étnicos, corre el riesgo de hacer que se pierda un valioso patrimonio cultural que ya se encuentra amenazado por el uso generalizado del inglés, verdadera "lingua franca" del archipiélago y evidentemente esencial en la expansión de la diáspora migratoria, una de las mayores del mundo.
En el sistema vigente hasta ahora, para los grados inferiores de la educación establecía material y docentes en la lengua materna de los alumnos, y posteriormente, de cuarto a sexto grado, establecía un programa de transición al filipino y al inglés.
Completamente opuesto es el enfoque del Departamento de Educación que impulsó la reforma. Este considera fundamental proporcionar los fundamentos de la lengua nacional desde edades tempranas, dándole prioridad sobre el posible estudio de las lenguas regionales. En cualquier caso, este último también estará sometido a un cierto grado de homologación a la ortografía oficial, así como a la disponibilidad de libros de texto y docentes adecuadamente formados. Se llevarán a cabo revisiones trienales para verificar los resultados de las nuevas directrices, pero el objetivo fundamental - como subrayó el senador Sherwin Gatchalian, ex presidente de la Comisión de Educación Básica y promotor de la ley - es favorecer una preparación lingüística múltiple, en filipino e inglés, anteponiéndola a la lengua hablada en el hogar al menos durante los primeros años del ciclo educativo.
13/09/2021 12:18
19/02/2020 11:29