Coronavirus: Khulna, pequeñas ayudas para el ejército de desocupados (fotos)

de Sumon Corraya

La policía amenaza a un electricista por haber violado la cuarentena. Los trabajadores jornaleros son los más golpeados por la crisis epidémica. El gobierno no hace nada para ayudar a las personas que se han quedado sin empleo. Estudiantes católicos donan paquetes de alimentos a los pobres que no pueden trabajar por la parálisis de las actividades económicas.

Khulna (AsiaNews) – “Me aventuré a salir de casa, en busca de trabajo; la policía quería aporrearme por haber violado la cuarentena por el coronavirus”. Es el relato de Michael Sarker, un electricista de 45 años que vive en Khulna, en el sudeste de Bangladés.

Los trabajadores jornaleros y aquellos empleados en pequeñas actividades, caso de Sarker, son los más golpeados por la veda impuesta por el gobierno de Daca para contener la difusión del Covid-19. Hasta el momento, en Bangladés se registran 54 infectados y 6 muertos.

Sarker se quedó sin trabajo tras el cierre de todas las fábricas de Khulna. Solía ganar 350 takas (cerca de 4 euros) por día: demasiado poco para hacer frente a las necesidades de su familia. En esta nueva situación, para él resulta aún más difícil dar de comer a su mujer y a sus hijos. “Estamos sin dinero. Si alguno de mis seres queridos llegara a enfermar, no podría permitirme un médico”, explica Sarker a AsiaNews. Él espera que las fábricas locales reanuden pronto su actividad, para poder retomar su trabajo.

Usha Mazumdar, una viuda de 50 años, se encuentra en la misma situación. “La empresa constructora donde trabajo – cuenta – tuvo que cerrar por la cuarentena. Yo ganaba 300 takas al día [cerca de 3 euros]. Era poco, sí, pero al menos podía dar algo de comer a mi hijo”. La mujer, que para sobrevivir ha tenido que pedir arroz a sus vecinos, acusa al gobierno por no hacer nada para ayudar a las personas que se han quedado sin trabajo.

Al igual que otros hombres y mujeres que no pueden trabajar debido a las restricciones impuestas por las autoridades, Sarker y Mazumdar reciben la ayuda de un grupo de estudiantes católicos de la ciudad. Son muchachos y jóvenes que pertenecen al Movimiento de los Estudiantes Católicos de Bangladés, dependiente de la Conferencia local de obispos católicos.

Las ayudas consisten en una caja alimentaria que contiene 5 kg de arroz, un kilo de legumbres y patatas, aceite, sal y jabón. “Esta donación – confiesa Sarker – es una gran ayuda para todos nosotros. Tengo que agradecer la generosidad de estos jóvenes”. Mazumdar dice que la caja de alimentos recibida la ayudará a ella y a su hijo a salir adelante por al menos una semana.

Además de la contribución de los estudiantes católicos de Khulna, la adquisición de las cajas alimentarias ha sido lograda con la ayuda de muchos fieles de la diócesis local. El objetivo es recaudar más fondos y ayudar a más personas. “Trabajamos para mejorar las condiciones de vida de nuestra ciudad. Puede ser una colecta de fondos para los más necesitados, una campaña educativa, o bien una iniciativa para limpiar las calles de la ciudad”, explica Sourov Saha, presidente del movimiento estudiantil.