Comienza el Año del Buey: promete ‘suerte en abundancia’ para salir de Covid-19

de Paul Wang

Se suspendieron los tradicionales viajes y encuentros. Cientos de millones de inmigrantes pasarán las vacaciones en los lugares donde trabajan. El año pasado, los casinos de Macao perdieron el 63% de sus ingresos. Los astrólogos aseguran que este año habrá riqueza y éxito. Los buenos deseos del Papa Francisco.

Hong Kong (AsiaNews) - Al menos 2.000 millones de personas de los países del Extremo Oriente y del Sudeste Asiático celebran hoy el Año Nuevo Lunar: no sólo China, Corea, Japón y Vietnam, sino también todos aquellos países en los que hay un porcentaje considerable de emigrantes chinos: Myanmar, Tailandia, Indonesia, Malasia, Singapur, etc,

Muy a menudo, las celebraciones de Año Nuevo son los únicos feriados que se otorgan a los trabajadores y duran al menos 15 días, hasta la Fiesta de los Faroles.

Cada año está bajo la influencia de uno de los 12 animales del zodiaco. Este año es el Año del Buey (o del Búfalo), que se prolongará hasta el 31 de enero de 2022. Según las tradiciones astrológicas chinas, el buey es un animal que trabaja duro y puede soportar cualquier dificultad, un animal capaz de dar frutos, estable y decidido. Por eso es prometedor en un año todavía marcado por los efectos de la pandemia de coronavirus.

Sin embargo, los comienzos no son prometedores. En China, el gobierno ha desaconsejado los viajes. Normalmente, antes de las vacaciones de Año Nuevo, cientos de millones de emigrantes regresan a su pueblo para festejar con sus familias. Pero este año, muchos pasarán las vacaciones en los lugares donde trabajan y perderán la única oportunidad en el año para ver a sus hijos y padres.

Los viajes también también están interrumpidos en Indonesia y Vietnam, así como en Hong Kong. Los viajes al extranjero se ven frenados por las cuarentenas exigidas en los viajes de ida y vuelta. Incluso en Macao, los casinos, habitualmente llenos para "probar suerte en el nuevo año", permanecerán casi vacíos. A lo largo de 2020, los casinos de la antigua colonia portuguesa han perdido el 63% de los ingresos.

Quizás la atmósfera gris que se respira sea la causa de predicciones astrales llenas de grandes promesas, al menos, para los supersticioso: el año que ha comenzado estará "lleno de suerte", "con un trabajo que será recompensado", "capaz de atraer la prosperidad y el éxito". Para facilitar la buena suerte, se recomienda vestirse con colores amarillos y verdes y llevar baratijas metálicas.

También en el amor todo será magnífico porque este año se fortalecerán las relaciones de amistad y amor. Y -se asegura- "no habrá eventos explosivos o catastróficos": en definitiva, todo lo contrario de lo que ocurrió en 2020.

Como ya es tradición, el Papa también ofrece sus mejores deseos para el Año Nuevo Lunar. En una audiencia celebrada el 10 de febrero, el Papa Francisco dijo: "En Extremo Oriente y en varias partes del mundo, el próximo viernes 12 de febrero, muchos millones de hombres y mujeres celebrarán el Año Nuevo Lunar. A todos ellos y a sus familias les envío un cordial saludo, junto con el deseo de que el nuevo año traiga frutos de fraternidad y solidaridad. En este momento concreto, en el que existe una gran preocupación por afrontar los retos de la pandemia, que afecta no sólo al cuerpo y al alma de las personas, sino también a sus relaciones sociales, expreso el deseo de que todos disfruten de plena salud y serenidad de vida. Por último, al invitar a rezar por el don de la paz y de cualquier otro bien, recuerdo que ello se obtienen con bondad, respeto, previsión y valentía, sin olvidar nunca la atención preferencial por los más pobres y débiles".