Arzobispo de Erbil: escuela, instrucción para salvar a los cristianos de la barbarie del Estado Islámico
Erbil (AsiaNews) - “Hoy podemos decir que el Kurdistán iraquí es seguro y que su gobierno es una gran ayuda para nosotros. Ahora esperamos la liberación de nuestras tierras pero, mucho más importante, esperamos que éstas se vuelvan seguras antes de iniciar la reconstrucción”. Es lo que afirma a AsiaNews el arzobispo caldeo de Erbil (en el Kurdistán iraquí) Mons. Bashar Warda, al cumplirse un año del gran éxodo de la comunidad cristiana de la Llanura de Nínive, abandonada de inmediato ante el avance del Estado Islámico. Frente a una situación política “complicada” a nivel “regional”, agrega el prelado, “todo lo que podemos hacer es ayudar a nuestra gente, favorecer la colaboración recíproca y animarlos a quedarse con programas de ayuda dirigida en estos tiempos difíciles”. Y promover la instrucción entre los jóvenes, como respuesta a la barbarie jihadista.
En la noche del 6 al 7 de agosto del año pasado cientos de miles de personas dejaron sus pueblos en la Llanura de Nínive desde Qaraqosh a Karameles, con abrumadora mayoría cristiana, encontrando refugio en Erbil y en otras zonas del Kurdistán. La semana pasada el patriarca caldeo mar Louis Raphael I Sako dirigió al Papa Francisco y a los obispos de todo el mundo una oración para recordar el drama de esta comunidad perseguida. Un llamado a la paz y a la certeza “antes de que sea demasiado tarde” y la fuerza “de permanecer firmes en esta tempestad”.
Mons. Warda, desde el inicio en primera línea en la obra de asistencia y ayuda a los cristianos refugiados, recuerda “la gran ayuda recibida” y confirma que hoy, a 12 meses de distancia del éxodo bíblico “no tenemos familias alojadas en tiendas, en aulas escolares ni en edificios que no hayan sido terminados de construir”. La Iglesia caldea alquiló “más de 570 viviendas entre casas y departamentos”, a los cuales de han agregado 1670 prefabricados y el sostén económico a las familias que han alquilado por sí mismas una vivienda”.
“Un refugio acogedor, instrucción y cuidados médicos” quedan todavía como servicios primarios por garantizar a las familias refugiadas, advierte el arzobispo caldeo de Erbil, con particular atención al ámbito sanitario. En la capital del Kurdistán iraquí existen dos clínicas, la Mat Shmone y la Mar Yousif. a las cuales recurren miles de personas; más de 2mil pacientes en la St. Josehp, agrega, que tiene un costo mensual de gestión de más de 42mil dólares, cubierto en gran parte por las donaciones que recibimos”.
Gracias a la colaboración de ONGs internacionales y de entidades caritativas católicas se construyeron 11 escuelas, desde junio de este año 13mil familias reciben comida y otros elementos de primera necesidad. “Como Iglesia - explica el prelado- estamos buscando aliviar las dificultades de la vida cotidiana. Una situación bien lejos del ideal, pero estamos trabajando para que puedan vivir con dignidad”. Los prófugos “tienen poca esperanza en el futuro”, agrega, “pero debemos darles coraje, estar cerca cuyo, escucharlos y dar a ellos lo que necesitan”.
“La esperanza para mí - cuenta Mons. Warda - no es un mero concepto sino un modo de vivir y debemos comprenderlo en la vida cotidiana”. Para algunos, agrega, es “una locura” invertir grandes sumas de dinero en proyectos de asistencia -sanidad, viviendas, instrucción- pero “como obispo debo tomar bajo mi cuidado las necesidades cotidianas de mi gente y mostrarles que el amor de Cristo supera las maldades cometidas por el Estado Islámico”. En el largo período, advierte, los más grandes peligros que corren los cristianos de Medio Oriente son representados “por la ignorancia y el analfabetismo”, por esta razón “trabajamos para ayudar a nuestros jóvenes a terminar sus estudios”. Es difícil imaginar un futuro sin la instrucción de los chicos y chicas cristianos: “nuestros antepasados - concluye el prelado - eligieron la educación como instrumento de promoción de la cultura en la tierra de Mesopotamia, invadida por el desierto Arabe en la época de difusión del Islam. Una situación muy similar a la de hoy, que ve a los cristianos tener que soportar el avance del Estado Islámico”. Por otra parte la contribución de los cristianos en el pasado en los campos de la Filosofía , la Historia, las Matemáticas y la Ciencia es reconocida todavía hoy por los intelectuales iraquíes.(DS)
17/12/2016 13:14