11/10/2022, 14.20
PUERTA DE ORIENTE
Enviar a un amigo

A un año de las elecciones, Irak está sin gobierno y al borde de la guerra civil

de Dario Salvi

Llamamiento de la misión de la ONU, pidiendo un "diálogo sin condiciones previas" que permita desbloquear la situación de estancamiento político e institucional. Desde las elecciones del 10 de octubre de 2021, aún no se ha llegado a un acuerdo para el nombramiento de un primer ministro y un nuevo gobierno. El actual ejecutivo sólo está facultado para gestionar los asuntos corrientes. Los problemas económicos y el despilfarro de la riqueza. Un nudo sin resolver: los refugiados (cristianos).

 

Milán (AsiaNews) - Es menester un "diálogo sin condiciones previas" para desbloquear la situación de estancamiento político e institucional que Irak arrastra desde hace un año. Las elecciones parlamentarias de octubre de 2021 no garantizaron una mayoría definitiva, y luego prevaleció la lógica de los vetos cruzados. El último en lanzar el llamamiento es la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Iraq (UNAMI), que hace un llamamiento a todos los actores en juego, desde los sadristas a los pro-iraníes, desde los suníes a los kurdos, para que aúnen esfuerzos a fin de permitir el surgimiento de un nuevo ejecutivo.

El comunicado de la ONU insta a las partes a “asumir un compromiso”:  "deben ponerse de acuerdo en los objetivos clave" para abordar las "necesidades del pueblo iraquí" y "establecer un gobierno eficaz y con plenos poderes". Sin embargo, en el horizonte no se vislumbran avances positivos: el vacío de poder corre el riesgo de favorecer, hoy como en el pasado, una nueva espiral de violencia por parte de movimientos yihadistas o grupos de interés apoyados por actores regionales o internacionales. Se trata de un impasse institucional, antes que político, un abismo -como lo definen los obispos caldeos- que debería resolverse, según algunos, no con una votación anticipada, sino con una reestructuración del Estado y modificaciones en las reglas de la competencia. También en este caso, el interés por el país queda relegado a un segundo plano, avasallado por el egoísmo partidista y los objetivos personales de los dirigentes políticos y sus mentores en el extranjero.

 

Parálisis institucional

Hace un año, Irak celebró las elecciones parlamentarias anticipadas, en respuesta a las protestas callejeras en todo el país contra la corrupción y la malversación. Hasta la fecha, el país no tiene un nuevo gobierno, ni ha podido votar -o aprobar- el presupuesto del Estado, así como el nombramiento de un nuevo presidente de la República y un primer ministro. Los cargos interinos se prorrogaron, salvo el del presidente de la Cámara: fue electo el suní Mohammed al Habousi, pero posteriormente presentó su renuncia. 

Para la Jefatura del Estado, que debe ser ocupada por un kurdo, se han quemado varias candidaturas y no hay consenso unánime sobre la prolongación del mandato de Bahram Salih. La parálisis ha llevado al propio Primer Ministro Mustafa al-Kadhimi a publicar un comunicado en el que, dirigiéndose a todas las fuerzas, pide que se renueve la colaboración y se ponga fin a la crisis mediante el diálogo. Sin embargo, las palabras parecen destinadas a caer en saco roto, prolongando el estancamiento de un ejecutivo interino con poderes y márgenes de maniobra muy reducidos. Especialmente en el ámbito económico, y de cara a las alianzas regionales y globales.

El quid de la cuestión gira en torno al ganador de las elecciones: el líder radical chií Moqtada al-Sadr no quiere someterse a un Ejecutivo de alianzas , pero tampoco tiene los números para formar un gobierno mayoritario. Por su parte, la facción chií proiraní del Coordination Framework presiona para que se forme un gobierno en base a acuerdos. 

A ello se suman las tensiones alimentadas por la injerencias del exterior y las potencias extranjeras con intereses opuestos. La parálisis en las instituciones contrasta con las movilizaciones en las calles: las tensiones se exacerbaron a finales de agosto tras el anuncio de Al Sadr de que quería retirarse de la vida política. Sus palabras empujaron a los simpatizantes y partidarios a las calles, con el riesgo de acabar en una guerra civil.

Tras el llamamiento del propio líder chií y un laborioso esfuerzo de mediación se restableció la calma, evitando un nuevo derramamiento de sangre. Pero los numerosos problemas del país persisten. "La situación sigue siendo extremadamente frágil", subrayó la enviada especial Jeanine Hennis-Plasschaert ante el Consejo de Seguridad de la ONU. “Demasiados iraquíes han perdido la confianza en la clase política y en su capacidad para actuar en interés del país”, agregó.

 

Crecimiento y pobreza

Irak es un país rico en hidrocarburos, pero devastado por décadas de conflicto. Este año ha logrado importantes ingresos gracias a las exportaciones de petróleo, riquezas que terminan atrapadas  -y sin utilizar- en las arcas del Banco Central, donde las reservas de divisas han alcanzado casi 90.000 millones de euros. Para invertir esta riqueza se necesita un gobierno en plenas facultades y capaz de presentar un presupuesto al Parlamento, prerrogativa que no corresponde al ejecutivo interino, ya que sólo puede gestionar los asuntos corrientes. “Cualquier proyecto de infraestructura requiere años de planificación", dice el economista Yesar Al-Maleki en diálogo con L'Orient-Le Jour, " La situación política ha provocado una gran perturbación, y esto agrava la mala reputación" del país, agrega.

Por otro lado, el Banco Mundial muestra proyecciones de un crecimiento económico medio anual del 5,4% entre 2022 y 2024. En junio, el Parlamento aprobó una ley de financiación de emergencia por casi 18.000 millones de euros, que incluye la compra de gas y electricidad, y también de granos para garantizar la "seguridad alimentaria". Esta situación de caos "no permite oportunidades de crecimiento económico del sector privado", a pesar de su enorme potencial. De cara a 2023, las autoridades pueden verse tentadas a aprobar otra ley de financiación de emergencia. De hecho, varios proyectos presentados por el Ministerio de Petróleo y las empresas extranjeras avanzan con demasiada lentitud. Y el costo lo paga la gente: en una nación de 42 millones de habitantes, casi cuatro de cada diez jóvenes están sin trabajo y un tercio de la población vive en la pobreza (fuentes de la ONU).

 

Los desplazados, una emergencia actual

Son los sectores más débiles y marginados de la población los que sufren. Entre ellos están los refugiados cristianos que, en el verano de 2014 tras el ascenso del Estado Islámico (EI, antes Isis), abandonaron sus hogares y tierras en Mosul y la llanura de Nínive. Pocos de ellos pudieron regresar; son muchos más los que siguen abandonados a su suerte, y un gobierno débil, combinado con instituciones y realidades de ayuda prácticamente ausentes, han contribuido a agravar la emergencia. Entre las pocas realidades que intentan ayudar, aunque con recursos limitados, está la Iglesia caldea y su primado, el card. Louis Raphael Sako, quien en los últimos días visitó el centro de acogida de Zayouna, en las afueras de la capital, para acompañar a los huéspedes en sus sufrimientos y necesidades.

El 5 de octubre el cardenal Sako, acompañado por el obispo auxiliar Basil Yaldo,visitó el complejo de la Virgen María, que el Departamento de Inversión y Desarrollo de Bagdad pretende evacuar. Las instalaciones se encuentran en terrenos estatales, y alojan hasta 120 familias que fueron reubicadas por el gobierno central. Algunos de los problemas a los que se enfrentan estas familias son el inicio del curso escolar, la necesidad de garantizar que sus hijos puedan asistir a clase y la llegada del invierno. El cardenal Sako está negociando con los responsables de la administración capitolina el aplazamiento de la evacuación. Por lo menos por un año, para poder encontrar una alternativa adecuada y alojarlos en otro lugar, mientras Irak trabaja en soluciones a largo plazo. Lo que la Iglesia desea evitar, ante todo, es un nuevo éxodo al extranjero -a Europa, Norteamérica o Australia- , que incrementaría el ya elevado número de caldeos en la diáspora.

 

"PUERTA DE ORIENTE" ES EL NEWSLETTER DE ASIANEWS DEDICADO A ORIENTE MEDIO. 

¿QUIERES RECIBIRLO CADA MARTES EN TU CORREO ELECTRÓNICO? SUSCRÍBETE AL BOLETÍN DE NOTICIAS EN ESTE ENLACE

TAGs
Enviar a un amigo
Vista para imprimir
CLOSE X
Ver también
Musulmana, ex radical: Riad y el salafismo (wahabí) un peligro para el islam y para el mundo
17/12/2016 13:14
Sacerdote iraquí: la ‘derrota militar’ de Isis no cancela la amenaza yihadista
03/11/2017 14:18
Beirut, elecciones parlamentarias: Hezbolá pierde la mayoría
17/05/2022 17:07
Académico iraquí: hacen falta reformas, no elecciones. La visita del Papa, una 'oportunidad desperdiciada'
06/09/2022 13:48
Elecciones en Turquía: el destino de Erdogan y el futuro de un país polarizado
24/01/2023


Newsletter

Suscríbase a la newsletter de Asia News o cambie sus preferencias

Regístrese
“L’Asia: ecco il nostro comune compito per il terzo millennio!” - Giovanni Paolo II, da “Alzatevi, andiamo”