Sindacalista se refugia en el templo budista Jogye. Cientos de policías para forzarlo a salir

Han Sang-gyun es el presidente de la Confederación Coreana de los sindicatos unidos. Desde el 14 de noviembre que vive dentro del lugar de culto: las autoridades quieren arrestarlo por los desórdenes contra el gobierno del mes pasado. Los agentes, que son más de 600, están dispuestos a utilizar la fuerza para ello. El abad: “Sería una ataque al budismo coreano”.

Seúl (AsiaNews) – Crece la tensión en las inmediaciones del templo central del budismo Jogye en Seúl, donde, desde el 14 de noviembre pasado, está atrincherado el jefe de los sindicatos del país. El hombre es buscado por las autoridades porque se lo considera el promotor de los desórdenes contra el gobieno verificados en los días previos al 14 de noviembre. Han Sang-gyun, presidente de la Confederación coreana de los sindicatos unidos, ha solicitado y obtenido la protección de los monjes, que se han ofrecido a mediar por él. Sin embargo, hoy, más de 600 agentes se están alistando para una irrupción en el lugar de culto, y han dado las 16 (hora local) como ultimátum para su entrega.

El venerable Dobeop, abad del templo. declaró que una irrupción de tal tipo “representaría un ataque abierto al budismo Jogye, y hacia el budismo coreano en general”. Luego de haber anunciado querer brindar refugio al sindicalista, el religioso convocó a una conferencia de prensa: “Buda nos enseña que cada creatura que vive en el dolor ha de ser ayudada. He aquí por qué nos empeñamos en escuchar a todas las partes de la causa, y a encontrar una solución al problema”.

La Confederación ha pedido a todos sus inscriptos que se dirijan al templo para defender a Han, y los monjes han enviado a los fieles a hacer lo mismo, para defender la santidad del lugar. Junto a la catedral católica Myeongdong, de hecho, el templo central Jogye ha sido, durante los años de la dictadura militar, uno de los pocos refugios seguros para los activistas, demócratas y líderes del movimiento estudiantil.