Papa: que Dios sostenga los esfuerzos en curso para combatir la epidemia en China
Al referirse a la Shoah, dijo que “frente a esta inmensa tragedia, es inadmisible la indiferencia y es un deber la memoria”. “Nunca más”, que mañana, esta sea la oración de todos. Una oración “por las personas enfermas a causa del virus que se ha propagado en China. Que el Señor reciba en su paz a todos los difuntos, que consuele a las familias y sostenga el gran esfuerzo que está haciendo la comunidad china para combatir la epidemia”.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) – “Nunca más”, que ésta sea la oración de todos, en el aniversario de la Shoah. El Papa Francisco recordó de esta manera, luego del Ángelus, que mañana “se cumple el 75° aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz Birkenau, símbolo de la Shoah. Frente a esta inmensa tragedia, es inadmisible la indiferencia, y es un deber hacer memoria. Mañana, todos estamos invitados a hacer un momento de oración y recogimiento, diciendo cada uno, en su corazón: ¡nunca más!”.
Francisco también rezó “por las personas enfermas a causa del virus que se ha propagado en China. Que el Señor reciba en su paz a los difuntos, consuele a las familias y sostenga el gran esfuerzo que está realizando la comunidad china para combatir la epidemia”.
Antes del rezo de la oración mariana, dirigiéndose a las 20.000 personas presentes en Plaza San Pedro, Francisco había comentado el inicio de la predicación de Jesús y su invitación a la conversión, “porque el reino de los ccielos está cerca. Este anuncio es como un potente rayo de luz que atraviesa las tinieblas y disipa la niebla”. “El llamado a la conversión, que Jesús hace a todos los hombres de buena voluntad, se comprende justa y plenamente a la luz del evento de la manifestación del Hijo de Dios”. “Tantas veces resulta imposible cambiar de vida, abandonar la senda del egoísmo, del mal y del pecado, porque uno centra el esfuerzo de conversión exclusivamente sobre sí mismo y sobre sus propias fuerzas, y no sobre Cristo y su Espíritu. Pero nuestra adhesión al Señor no puede ser reducida a un esfuerzo personal. Esto también sería un pecado de soberbia. En cambio, debe expresarse en una apertura del corazón y de la mente llena de confianza, para acoger la Buena Noticia de Jesús. ¡Es el Evangelio que cambia el mundo y los corazones! Por tanto, se nos llama a confiar en la palabra de Cristo, a abrirnos a la misericordia del Padre y a dejarnos transformar por la gracia del Espíritu Santo. Es desde aquí que comienza un verdadero camino de conversión”.
Luego del rezo del Ángelus, Francisco recordó que hoy se celebra la Primera Jornada de la Palabra de Dios y que también se conmemora el “Día Mundial de los enfermos de lepra”. “Estemos cerca – dijo - de todas las personas afectadas por el mal de Hansen y de cuantos se ocupan de ellos de diferentes maneras”.
02/05/2017 13:54