'Éxito' del Hajj: Teherán se abre al dialogo con Riad. No de los sauditas

Para el ministro saudita de Exteriores, Teherán debe “cambiar sus propias políticas”. Irán había agradecido a los sauditas por el “nuevo acercamiento” en el tratamieno a los peregrinos de la República islámica y espera “diálogos y negociaciones”.

Riad (AsiaNews/Agencias)- Riad rechaza la propuesta de diálogo avanzada por Irán al concluir el Hajj subrayando que, por el momento, no existen condiciones para un mejoramiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países. Teherán había agradecido al reino saudita por la gestión de la peregrinación mayor a la Meca, agregando que esto habría podido dar inicio a la apertura de los negociados entre los dos grandes rivales de la región medio-oriental.

“Si Irán quiere tener buenas relaciones con Arabia Saudita-subrayó el ministro de Exteriores Adel al-Juber que está de visita en Londres -debe cambiar sus propias políticas. Debe respetar el derecho internacional”. El Hajj es una obligación religiosa -agregó-, y no tiene nada que ver con la política.

Irán (chií) y Arabia Saudita (sunita) están en frentes opuestos en muchas de las importantes cuestiones que agitan tablero medio-oriental, del conflicto sirio a la guerra en Yemen. La ejecución de un dignatario chií logra aumentar la tensión en el reino saudita en enero 2016.al cual siguió el asalto a la embajada saudita en Irán y la sucesiva clausura de la representación diplomática.

El incidente determinó la interrupción de las relaciones diplomáticas entre los dos países. No obstante esto, uno 86 mil peregrinos iraníes han podido participar este año en la peregrinación mayor a la Meca, uno de los 5 pilares del islam y que se concluyó la semana pasada.

La mano tendida por Irán era una primera señal de distensión, después del incidente de 2015, que dio pie a la “fuga ruinosa” que causó la muerte al menos de 2300 personas, de las cuales 464 eran peregrinos iraníes.

“Agradecemos a Arabia Saudita -subrayó Ali Ghazi-Askar, responsable iraní para la organización del Hajj- por haber adoptado un nuevo acercamiento en el tratamiento a los peregrinos iraníes”. Él agregó que permanecen siempre las “diferencias” entre las dos naciones, pero lo importante es “resolver las diferencias a través del diálogo y de las negociaciones”. “Ahora -concluyó- después de un Hajj bien logrado es justo que ambas partes negocien para resolver las cuestiones bilaterales en otros campos”.

Más cauto la actitud del ministro iraní de Exteriores, Javad Zarif, el cual recuerda que no hay todavía “una prospectiva clara para el cambio” en las relaciones entre Riad y Teherán.

“Si habrá un desarrollo -agregó- en la mentalidad de los sauditas, habrá ciertamente un desarrollo positivo y encontrará una reacción positiva de Irán”.