Xinjiang: tarde o temprano, los ‘centros de entrenamiento profesional’ (campos de concentración) serán clausurados
Por primera vez, un responsable de gobierno admite que los campos son “medidas provisorias”. Sin embargo, se afirma que el número de reclusos sería “inferior al millón”. Activista kazajo arrestado en su país: será procesado por haber revelado la existencia de los campos de concentración.
Beijing (AsiaNews) – Los centros de “entrenamiento profesional” situados en Xinjiang, que muchos países definen, por el contrario, como “campos de concentración” para la población uigur, “irán desapareciendo gradualmente”. Es lo que dijo ayer Shohrat Zakir, presidente del gobierno de Xinjiang, durante un encuentro al margen de la Asamblea Nacional Popular, que se está desarrollando en la capital china.
Hace tiempo que grupos por los derechos humanos y gobiernos extranjeros acusan a China de mantener a cuando menos un millón de uigures en estos campos de concentración, donde son sometidos a una reeducación, además de a torturas y privaciones, ateniéndose a los testimonios brindados por varias personas salidas de estos centros.
Hasta ahora, Beijing siempre se defendió diciendo que los centros sirven para mejorar la calificación laboral y la vida de los uigures, además de ser una “medida preventiva contra el extremismo”.
Es la primera vez que un responsable de gobierno dice que los campos de “entrenamiento profesional” son una “medida provisoria”.
China ha recibido críticas de países islámicos de Asia, entre ellos, de Turquía, Pakistán, de la Organización de la Conferencia Islámica, así como de los Estados Unidos y de países europeos.
Zakir no comunicó en ningún momento a cuánto asciende el número de reclusos; sin embargo, dijo que está “muy lejos del millón”, cuando los investigadores de la ONU confirman la cifra de un millón.
Entre los prisioneros también hay musulmanes y grupos de personas de países cercanos, como los kirguisos y kazajos. Luego de ser liberados, algunos de ellos han denunciado que los reclusos son utilizados como mano de obra a bajo costo para producción destinada a la venta en el exterior.
El gran poder comercial de China logra cubrir con un manto de silencio o bien aligerar las críticas provenientes de varios países islámicos, como Arabia Saudita e Irán, además de las de países europeos o del Asia central. En Kazajistán, el activista Serikjan Bilash, de la ONG AtaZhurt (en kazajo, “madre patria”) fue arrestado en la noche del 9 de marzo y está siendo sometido a una investigación judicial. Se lo acusa de presunta “incitación al odio, a la discordia en asuntos internacionales, raciales o religiosos”. Bilash fue uno de los primeros en denunciarla existencia de campos de concentración en Xinjiang y se convirtió en el vocero de numerosas personas de Kazajistán que reclaman a China noticias sobre sus parientes o vecinos internados en estos sitios.
17/06/2019 14:34
08/01/2020 12:46
03/01/2020 14:56