Xi Jinping inspecciona las tropas en Hong Kong. Las protestas de los activistas

de Paul Wang

En el desfile militar también participaron soldados de Shenzhen. Miembros de Demosisto se encadenan en el monumento de la bauhinia. Vigilia por la liberación de Liu Xiaobo. Fueron arrestados 26 activistas, y luego se procedió a liberarlos.

Hong Kong (AsiaNews)- El presidente chino Xi Jinping llegó ayer a Hong Kong para participar en las ceremonias en ocasión de la conmemoración de los 20 años del retorno del territorio a la madre patria y del fin del gobierno colonial británico.

Gran parte de la población de Hong Kong es pesimista en lo que respecta al futuro: ellos afirman que el principio que debía guiar la convivencia entre Hong Kong y China, “una nación, dos sistemas”, fue ampliamente traicionado, tanto por el gobierno chino y como por el gobierno local.

En el discurso pronunciado a su llegada, Xi dijo que “Hong Kong siempre ha estado en su corazón”. En efecto, Xi visitó a menudo el territorio antes de convertirse en presidente, secretario general del Partido y jefe de la Comisión militar.

Y es en virtud de desempeñar este último cargo que él inspeccionó las tropas del Ejército para la Liberación del pueblo que están establecidas en Hong Kong desde hace 20 años. Al desfile se también se sumaron soldados venidos de Shenzhen, reivindicando así el carácter de “una nación” y la sumisión militar de Hong Kong a China.

Por su parte, grupos de activistas se han manifestado de diferentes maneras, reivindicando el aspecto de los “dos sistemas” y sobre todo el elemento “libertad” para Hong Hong.

En la vigilia de la llegada de Xi, algunos jóvenes del partido Demosisto, entre los cuales figuraba el joven de 18 años Joshua Wong, uno de los iniciadores del movimiento Occupy Central, se encadenaron al monumento dorado de la bauhinia, donado por China e inaugurado el 1° de julio de 1997. Luego, junto a muchos otros, se manifestaron en el centro de la isla por la liberación del gran disidente Liu Xiaaobo, quien está casi a punto de morir.

La policía arrestó a decenas de ellos, cuando menos 26, pero ayer fueron liberados bajo fianza.

El programa de Xi es intenso: hoy participa en un banquete y luego en un espectáculo; mañana estará en la ceremonia de jura del nuevo gobierno junto al nuevo jefe del Ejecutivo, Carrie Lam. Los activistas han programado otras manifestaciones, entre las cuales también planean una para el 1° de julio, que se realiza todos los años desde 2003 y que ha contado con la participación de más de 500.000 personas, para rechazar el intento de imponer a Hong Kong una ley sobre seguridad nacional.

Por su parte, Xi se comprometió a mantener el principio “una nación, dos sistemas”, pero también elogió al gobierno local por haber puesto un freno a las miras independentistas. Pero no dio ninguna respuesta a los periodistas que le pedían noticias sobre la suerte de Liu Xiaobo.