Vocero de la Iglesia católica: dolor por las víctimas cristianas. Sinaí zona peligrosa

El P. Rafic Greiche expresa cercanía a la comunidad copta que llora a las seis víctimas de los ataques de las últimas semanas. En la zona en la frontera con Israel y Gaza hay grupos terroristas que son muy activos, atacados sobre todo los militares y musulmanes. El gobierno trata de garantizar la seguridad pero es imposible evitar cada atentado.

El Cairo (AsiaNews)- La zona en la cual en estos días sucedieron los homicidios de cristianos coptos “es una zona muy peligrosa, en la frontera con Israel y la Franja de Gaza”, donde operan desde hace tiempo “grupos yihadistas y terroristas, entre los cuales el Estado islámico”. Es cuánto subraya a AsiaNews el p. Rafic Greiche, vocero de la Iglesia católica egipcia, comentando el asesinato de miembros de la minoría religiosa en Al-Arish, capital de la Gobernación de Sinaí del Norte. “En estos días han atacado a cristianos-agrega el sacerdote- pero en el pasado, también recientemente, los ataques han involucrado a musulmanes y sobre todo y a militares del ejército”.

Ayer en el norte de la península de Sinaí fue asesinado un cristiano copto egipcio y su casa fue incendiada. Fuentes locales refieren que la víctima era un plomero; él habría sido asesinado con un arma de fuego en su casa, delante de su esposa y sus pequeños hijos.

Una célula yihadista ligada a las milicias del Estado islámico (EI), reivindicó el ataque, estos grupos son muy activos en la región y fueron ya protagonistas de ataques contra los cristianos contra los cristianos. Se trata de la tercera víctima en solo dos días para la comunidad copta local.

El pasado 19 de febrero, en un video en el sitio de mensajería Telegram, el estado islámico había prometido atacar a la comunidad cristiana. Y los ataques no se hicieron esperar. En respuesta a las crecientes amenazas y los repetidos episodios de violencia, unas 200 familias cristianas han dejado Al Arish en las últimas dos semanas.

Interpelado por AsiaNews, el p. Rafic confirma la “peligrosidad” de la zona en la cual sucedieron los ataques de estos días y que, en el pasado, “han involucrado también a turistas”. “Estamos tristes por lo que está sucediendo-prosigue el sacerdote- y por las violencias que han afectado a los coptos. Estamos con ellos, rezamos por ellos y queremos manifestar toda nuestra cercanía”. Sin embargo, continúa el vocero de la Iglesia católica egipcia, se necesita “continuar manteniendo firme nuestra fe”, aún frente a estos ataques. Es cierto, agrega, que aquella zona es ya demasiado peligrosa y “quizás es mejor abandonar por un poco de tiempo esa zona. Están en curso operaciones militares, operan grupos terroristas, está en acto una guerra a todo campo por esto las condiciones son tan difíciles y es duro vivir en la normalidad”. Diverso, en cambio, el discurso en lo que concierne el resto del país donde el gobierno trata de garantizar la seguridad, si bien es imposible prever y evitar con tiempo cada acción terrorista. “No se puede jamás saber dónde y cuándo podrán atacar-concluye el p. Rafic-como sucedió por otro lado también en Europa, en París, Niza y en Alemania. Pero esto no nos debe impedir ir adelante y mantener firme nuestra fe”.

Desde el golpe de Estado militar de 2013, que puso fin a la presidencia de Mohamed Morsi y derrocado el gobierno de los Hermanos musulmanes, el norte del Sinaí es teatro de sangrientos atentados realizados por milicianos yhiadistas. Los ataques se concentran contra repartos del ejército, policías, funcionarios de seguridad, también si no fue ahorrada ni siquiera la minoría cristiana copta, el 10% del total de la población egipcia y la más grande de Oriente Medio.

El ataque más sangriento fue el que le toco a la iglesia copta ortodoxa en el Cairo; un ataque suicida que causó 29 víctimas.

En el pasado, también al-Qaeda había puesto en la mira a los cristianos coptos. En particular, en el año 2010 la célula local de la red del terror guiada por Osama Bin Laden había prometido la “limpieza” de los cristianos en la región del Sinaí. Amenazas que se concretizaron la noche del primero de año de 2011, cuando una autobomba explotó delante de una iglesia copta matando a 29 personas.