Un sacerdote de Shanghái, nombrado consejero político. Quizás sea el futuro obispo
El Pbro. Ignacio Wu Jianlin encabeza el grupo de gestión de la diócesis de Shanghái, cuyo obispo, Tadeo Ma Daqin, se encuentra bajo arresto domiciliario. Todos los miembros de la Conferencia política consultiva del pueblo chino son obispos, a excepción de un laico. Tres de ellos son ilícitos. El cambio de política del Vaticano.
Shanghái (AsiaNews) – El Pbro. Ignacio Wu Jianlin, un sacerdote que encabeza el grupo que guía la diócesis de Shanghái, acaba de ser nombrado miembro del 13er Comité nacional de la Conferencia política consultiva del pueblo chino (CPCPC), un organismo que el Partido comunista chino considera como un cuerpo de consejeros de altísimo nivel, pero que a menudo es definido como un “vaso de expansión político”, es decir un instrumento orientado a transmitir la política del Partido a los cuerpos sociales intermedios.
El Comité permanente de la CPCP, que se reunió el 24 de enero pasado, ha anunciado la nueva lista de 2.158 miembros, que se reunirán para su primera sesión en marzo.
La CPCP tiene la responsabilidad de escuchar las voces de grupos religiosos, culturales y sociales, y mantenerlos en contacto con la política del Partido. Sus miembros provienen de diversos sectores sociales y partidos políticos de China, de zonas de administraciones especiales, como Hong Kong y Macao, o son invitados especiales.
De los 67 miembros del sector religioso, el P. Ignacio Wu Jianlin es el único miembro católico recientemente nombrado; los otros ocho católicos fueron todos confirmados. Él es responsable del decanato central de la diócesis de Shanghái, y supervisa un grupo de cinco sacerdotes que gestionan la comunidad oficial. Dicho grupo fue establecido poco antes de la muerte de Mons. Aloysius Jin Luxian, una figura muy influyente de la Iglesia china, que también fue miembro del CPCP desde 1988 hasta su muerte, ocurrida en 2013.
La tradición marca que el clero católico nombrado en la Asamblea Nacional del Pueblo (el parlamento chino) o en el CPCP está constituido por obispos o sacerdotes destinados a convertirse en obispos, con o sin la aprobación de la Santa Sede. Por ejemplo, el obispo ilícito Pablo Lei Shiyin ha sido miembro del CPCP desde 1998, mucho tiempo antes de que fuera ordenado obispo, sin mandato papal, y excomulgado por la Santa Sede en 2011.
Según algunos católicos de Shanghái, el nombramiento del P. Wu en el CPCP es un signo que anticipa que el podría convertirse en el nuevo obispo de Shanghái. El actual obispo de la diócesis, aprobado por la Santa Sede, Mons. Tadeo Ma Daqin, aún se encuentra bajo arresto domiciliario, con una libertad limitada para participar en reuniones de gobierno, pero sin ningún tipo de permiso para ejercer su servicio episcopal.
El Partido comunista continúa subrayando que, en el sector religioso, necesita reforzar la presencia de fuerzas patrióticas confiables. Peter, un católico de Shanghái, explica: “El Partido ya no se fía de Mons. Ma. En 2012, el día de su ordenación episcopal, él hizo quedar mal a la Asociación Patriótica; luego hizo un cambio de posición, y en 2016, escribió un artículo en el cual elogia a la asociación… [Pienso que] el P. Wu pasará a encabezar la diócesis, y que Mons. Ma quizás quede como auxiliar”.
Otra fuente local, que ha solicitado permanecer en el anonimato, cuenta que hay rumores según los cuales el Vaticano tendría como candidato favorito para el episcopado a un sacerdote que regresó del exterior recientemente. “Si, en un futuro, el P. Wu es nombrado obispo en lugar de este sacerdote, habrá otro caso que batallar en las negociaciones entre China y la Santa Sede”.
En la lista de miembros del CPCP fue agregado Wang Yang, el número 4 del Comité Permanente del Politburó. Esto significa que él pasará a ser el nuevo presidente del CPCP, reemplazando a Yu Zhengsheng, que ha alcanzado el límite de edad. Considerando su currículum, puede constatarse que Wang no tiene experiencia en asuntos religiosos. Hay observadores que piensan que, a pesar de que se lo considera un liberal, él no podrá aportar mejoras a la libertad religiosa.
Las otras personalidades católicas confirmadas en el CPCP son Juan Fang Xinyao, de Linyi; Pablo Lei Shiyin, de Leshan; José Li Shan, de Beijing; José Ma Yinglin, de Kunming; Pablo Meng Qinglu, de Hohhot; José Shen Bin, de Haimen y Vicente Zhan Silu, de Mindong, junto al laico Liu Yuanlong. Todos ellos ocupan posiciones en la Asociación Patriótica o en el Consejo de Obispos, dos organismos queridos por el gobierno, pero que no cuentan con el reconocimiento de la Santa Sede.
Entre ellos, los obispos Ma, Lei y Zhan son tres de los siete obispos ilícitos que aguardan el reconocimiento del Vaticano.
Días atrás, AsiaNews difundió una noticia según la cual el Vaticano había solicitado al obispo ordinario de Mindong –que guía a la comunidad subterránea, es decir, a más del 90% de los católicos de la diócesis- que diera un paso al costado, pasando a ser auxiliar o coadjutor de Mons. Zhan, quien estaría por ser reconciliado con la Santa Sede.
La medida sacudió a gran parte de la Iglesia en China y en el mundo: es muy raro escuchar que se le ordene a un obispo dejar la cátedra. Incluso cuando un obispo comete equivocaciones, se le pide que presente su renuncia. Incluso más, en el pasado reciente, cuando la Santa Sede aceptaba a un obispo ilícito, habitualmente era colocado como obispo auxiliar del prelado aprobado por el Vaticano. Ahora pareciera que la política se ha invertido.
09/03/2021 09:34
