Trump incorpora a los Pasdaran a la lista negra del terrorismo. Teherán amenaza con represalias

La Casa Blanca abre un nuevo frente contra Irán. Netanyahu aplaude la iniciativa. Para Damasco es una “condecoración” en el pecho de los Guardianes de la Revolución (Pasdaran).El Pentágono y la CIA también manifiestan estar sorprendidos ante la decisión. Rouhani: EEUU es el verdadero “líder del terrorismo mundial”.

Teherán (AsiaNews) - La decisión de la Casa Blanca de incluir a los Guardianes de la Revolución (Pasdaran), las milicias fieles al guía supremo, en la lista negra de las organizaciones terroristas abrió un nuevo frente entre Washington y Teherán. Y arriesga alimentar nuevos vientos de guerra. Por primera vez, los EEUU definen como “terrorista” a una organización militar perteneciente a otra nación soberana. Una decisión que provocó la inmediata respuesta de la República islámica, que declaró “organización terrorista” a las fuerzas americanas en Oriente Medio (CENTCOM).

La decisión tomada ayer permitirá al gobierno estadounidense imponer nuevas sanciones contra el grupo, atacando el sector de los negocios en los que los Pasdaran ocupan un rol activo en el contexto de la economía iraní. De hecho, una parte de la dirigencia de los Guardianes de la revolución -y entidades afiliadas a ellos- en el pasado ya terminaron en la mira de los EEUU por (presuntas) actividades subversivas, apoyo al terrorismo y por las violaciones de derechos humanos.

Anunciando la decisión, Trump habló de “un paso sin precedentes” del Departamento de Estado que reconoce “un dato de hecho: que Irán no solo es una nación que patrocina el terrorismo, sino que los IRGC (acrónimo de los Pasdaran) también participan activamente en la financiación y promoción del terrorismo como instrumento de gobierno”. La decisión, agregó, también permitiría “aumentar” significativamente el nivel de presión sobre Irán.

Inmediata fue la respuesta del presidente iraní Rouhani, que en una aparición en la TV de Estado exaltó el valor de los Guardianes de la Revolución que “han sacrificado su vida para proteger a nuestro pueblo y nuestra revolución (islámica de 1979)”. Además, agregó que EEUU es el verdadero “líder del terrorismo mundial” porque usa a varios grupos como “medios contra las naciones de la región” medio oriental.

Teherán no excluye reiniciar la construcción de los establecimientos nucleares de última generación, capaces -al menos potencialmente- de producir armas atómicas. Y la dirigencia de los Pasdaran recuerdan que las bases militares de los EEUU en Oriente Medio están “al alcance” de los misiles iraníes. A las amenazas se suma la hipótesis de clausurar el Estrecho de Ormuz, si Washington continúa “estrangulando” la economía de la República islámica.

En realidad los ataques de la administración americana terminan debilitando el frente moderado, dando un nuevo impulso al ala conservadora y fundamentalista.

Entre los que critican la decisión de la Casa Blanca -que ya en mayo de 2018 había creado fuertes grietas internas e internacionales ordenando el retiro del acuerdo nuclear (JCPOA) impulsado en su momento por Obama- hay altos oficiales del Pentágono y de la CIA. Entre ellos se cuentan el jefe del Estado mayor conjunto de las Fuerzas armadas, el general Joe Dunford, junto a otros militares de primera plana, que sostienen que tal medida podría provocar nuevas tensiones en Oriente Medio, sin afectar la economía iraní.

En estas horas el primero en exultar por la decisión fue el Premier israelí, Benjamín Netanyahu, comprometido en las últimas declaraciones de la campaña electoral. “Gracias -declaró el Premier saliente- por haber aceptado otro importante pedido mío, que sirve a los intereses de nuestros países y de los países de la región”. Fue opuesto el tenor de las declaraciones del gobierno iraní, que clasifica como “irresponsable” la decisión de la Casa Blanca, que representa un “ataque descarado” contra una nación soberana. En una comunicado, Damasco define como una “condecoración” el hecho de ser definido como un grupo terrorista por parte de Washington.