Tribunal de Seúl: no se puede reducir a dos candidatos el debate presidencial por TV

de Guido Alberto Casanova

Mientras se inicia la campaña electoral para los comicios del 9 de marzo -que decidirán quién será el sucesor de Moon Jae-in- se pide a las emisoras televisivas que eviten los debates cara a cara entre los representantes de los principales partidos. En las encuestas, el conservador Yoon Seok-youl lleva la delantera, seguido de Lee Yae-myung, candidato del partido demócrata en el poder.

Seúl (AsiaNews) - El debate electoral debe ampliarse. Así se pronunció ayer un tribunal de Seúl al comentar la intención de las tres principales emisoras televisivas surcoreanas de invitar sólo a los candidatos de los dos partidos mayoritarios al debate presidencial. Las elecciones del 9 de marzo determinarán quién será el sucesor de Moon Jae-in (que no puede volver a presentarse) en el gobierno: Lee Jae-myung por los demócratas, actualmente en el gobierno, o Yoon Seok-youl por los conservadores.

Si bien las emisoras televisivas pueden decidir por sí mismas los criterios para seleccionar a los invitados, el tribunal también subrayó que los debates televisivos son un medio fundamental para que los ciudadanos puedan informarse y comparar a los distintos candidatos durante la campaña electoral. En este sentido, el tribunal advirtió que: "los organismos de radiodifusión han sobrepasado el límite de su discrecionalidad", y es difícil aceptar la exclusión de candidatos menores.

Los jueces emitieron la sentencia luego de que Ahn Cheol-soo -el candidato centrista del Partido Popular que actualmente ocupa el tercer puesto en las encuestas- presentara un recurso de amparo contra la transmisión del debate la semana pasada. Según Ahn, un debate entre dos personas habría dado al público la falsa impresión de que la elección tiene sólo dos candidatos. El candidato centrista criticó duramente a los dos partidos mayoritarios, y calificó como “un acto de mala fe” la organización de un debate televisivo de alcance nacional pero ceñido a Lee y Yoon. Especialmente durante este fin de semana, el que precede al Año Nuevo Lunar coreano, durante el cual las familias se reúnen.

La decisión del tribunal de Seúl se produce en el marco de una campaña electoral muy agitada y poco estimulante para los votantes surcoreanos. A pesar de que solo faltan seis semanas para las elecciones, ninguno de los dos candidatos principales parece haber logrado encender el entusiasmo, y los constantes ataques personales -tanto a Yoon como a Lee- han desviado la atención de sus programas políticos.

A principios de mes, mientras la campaña de Yoon era sacudida por las divisiones y rivalidades internas del campo conservador, las encuestas indicaban que la oposición alternativa representada por Ahn estaba en alza. Incluso se especuló con la posibilidad de que las dos fuerzas de la oposición unificaran sus candidaturas. Sin embargo, en los últimos diez días, las tendencias respecto a la intención del voto parecen haber cambiado. Según un sondeo publicado por la agencia Yonhap News, Yoon habría recuperado el apoyo (42%) tras resolver las divisiones internas, superando al candidato demócrata (36,8%). Ahn, en cambio, ha caído al 10%. Con estos últimos datos en la mano, los conservadores sienten que tienen la sartén por el mango y el presidente del partido conservador ha empezado a pronunciarse enérgicamente contra la unificación de las candidaturas.

El debate televisado hubiera consagrado el dominio de los dos partidos mayoritarios en el debate público, reduciendo el espacio para los demás candidatos, pero la sentencia reabre el juego, al menos en parte. Yoon y Lee esperaban que el cara a cara consolidara su empuje o invirtiera la tendencia. Sin embargo, ahora tendrán que enfrentarse también a Ahn Cheol-soo y al candidato progresista Sim Sang-jung, quienes no perderán la oportunidad de presionarlos, dejando al descubierto los numerosos puntos débiles que los candidatos conservadores y demócratas han mostrado hasta ahora.