Tiananmen, 4 de junio: continúa la represión de Beijing contra los activistas partidarios de la democracia
A 28 años de la sangrienta represión perpetrada contra el movimiento democrático, muchos exponentes aún siguen en la cárcel o procesados. Ellos sufren penas más duras que los demás prisioneros. Para las autoridades, son “reincidentes” que opera con fines “políticos”. La lista de activistas, en la mira de Beijing.
Beijing (AsiaNews/CHRD) – Habiendo pasado 28 años de la sangrienta represión del movimiento democrático perpetrada por el gobierno chino, muchos de los que participaron en las protestas de 1989 todavía siguen detenidos o presos por haber proseguido su campaña a favor de los derechos humanos, del Estado de derecho y de las reforman de índole democrática. Estos individuos han desarrollado un rol destacado o se han unido a las protestas de 1989 siendo jóvenes estudiantes, o bien como profesores, periodistas, escritores u obreros.
Algunos han tenido que descontar períodos de detención por su rol en el movimiento, y han retomado sus actividades a favor de la democracia y los derechos humanos tras ser liberados. Las penas, para quienes participaron en las protestas de 1989, a menudo han sido más duras que las aplicadas a los demás prisioneros, porque las autoridades los tratan como “reincidentes” con “motivaciones políticas”, que los empujan a desafiar la legitimidad del Estado autoritario regido por un único partido [el comunista].
El último caso conocido de un activista arrestado por haber participado en las protestas de plaza Tiananmen es el de Miao Deshun (苗德顺), que habría sido liberado en octubre de 2016, después de haber estado en prisión los últimos 27 años. Si bien Miao hoy debiera estar gozando de la “libertad”, el gobierno no ha querido hacer pública su situación, de la misma manera que las autoridades continúan con su actividad de censura en relación a los eventos de 1989.
Cada año, coincidiendo con el aniversario de los hechos de plaza Tiananmen, el gobierno asume numerosas medidas orientadas a impedir a los ciudadanos que conmemoren a las víctimas del 4 de junio, tanto a nivel individual como grupal, en lo que respecta a grupos organizados y manifestaciones públicas de condolencias. En este período, la policía china suele convocar a diversos activistas para someterlos a interrogatorios, imponerles viajes forzados, ponerlos bajo arresto domiciliario, en régimen de detención administrativa o penal. La política gubernamental tiene como fin la cancelación de las protestas de Tiananmen a favor de la democracia, así como la sucesiva represión, que, con la eliminación de libros de texto y de discusiones públicas han llevado a una amnesia colectiva de las jóvenes generaciones de hoy en relación a esa etapa crítica de la historia de China. Muchos de los participantes del movimiento de 1989 que fueron perseguidos por su activismo, se han esforzado, en el contexto de su compromiso en la lucha por los derechos, por mantener viva la memoria de las víctimas, y han pedido al gobierno que emprenda investigaciones sobre las masacres y que brinde un resarcimiento a los familiares de las víctimas.
El CHRD (Chinese Human Rights Defender, Defensoría china de los Derechos Humanos, ndt) reclama al gobierno chino que: se ponga fin al impedimento para desarrollar debates públicos y conmemoraciones de las víctimas de la masacre de Tiananmen; se permita una investigación independiente y se entregue a la justicia a los responsable de la masacre; se ponga fin a la extendida política de represión sobre la sociedad civil y sobre los activistas que luchan por los derechos humanos; se libere a los activistas pro-derechos humanos que están en prisión, así como a aquellos que están bajo régimen de detención, de libertad condicional, de obligación de residencia forzosa, y que se suspendan las penas infligidas.
El CHRD ha documentado 22 casos que involucran a líderes de la protesta y a participantes en los movimientos de 1989, que aún continúan encarcelados o detenidos en China, por su activismo post-Tianamen:
En régimen de detención (16, en orden cronológico de detención):
- El escritor del Jiangsu Yang Tongyan (杨同彦), condenado a 12 años de prisión en 2006 por sus actividades políticas. Fue encarcelado durante 10 años por su participación en el movimiento de 1989.
- El miembro del Partido Demócrata Chino Xie Changfa (谢长发), del HUnan, que está cumpliendo 13 años de prisión infligidas en el 2009 por su trabajo dentro del partido. Pasó dos años en un campo de reeducación a través del trabajo por haber apoyado el movimiento de 1989.
- El ganador del Premio Nobel de la Paz Liu Xiaobo (刘晓波), de Beijing, condenado a 11 años de prisión en 2009 por liderar el movimiento "Carta 08". Asistente universitario en 1989, fue encarcelado durante 18 meses por su participación en el movimiento de 1989.
- El miembro del Partido democrático chino Liu Xianbin (刘贤斌), del Sichuan, que está cumpliendo 10 años de prisión infligidas en el 2011 por sus actividades. Pasó 30 meses en prisión por participar en el movimiento de 1989.
- El activista del Sichuan Chen Wei (陈卫) condenado a nueve años en 2011 por sus actividades en favor de los derechos humanos. Estudiante en 1989, Chen fue detenido después del 4 de junio y puesto en libertad en 1991.
- El activista del Guizhou Chen Xi (陈西) en prisión por una condena de 10 años impuesta en 2011 por sus actividades pro derechos humanos. Sirvió tres años en prisión por haber participado en los disturbios de 1989.
- El escritor Zhu Yufu (朱虞夫), de Hangzhou en el 2012 condenado a siete años por la lucha en pro de la democracia y los derechos humanos. Participó en el movimiento de 1989, mientras trabajaba en Hangzhou.
- El poeta Li Bifeng (李必丰) de Sichuan, 10 años de prisión infligidas en el 2012 por su activismo. Previamente, pasó cinco años en prisión por su papel en el movimiento de 1989.
- El activista del Xinjiang Zhao Haitong (赵海通) fue condenado a 14 años en el 2014 por sus actividades en defensa de los derechos humanos. Fue encarcelado por primera vez después de los trágicos sucesos de 1989.
- El activista de Guangdong Guo Feixiong (郭飞雄) que está cumpliendo seis años de prisión infligidas en el 2015 por su trabajo en favor de los derechos humanos. Guo participo en el movimiento de 1989 como un estudiante en Shanghai.
- El monje budista Wu Zeheng (吴泽衡) en el 2015 condenado a cadena perpetua por haber reclamado la libertad religiosa. Líder estudiantil en 1989, Wu fue condenado en Guangdong y cumple su condena en Xinjiang.
- El activista Tang Jingling (唐荆陵) de Guangdong, condenado a cinco años en 2016 por su activismo. Tang participó en el movimiento de 1989, cuando todavía era un estudiante.
- El monje budista Sheng Guan (圣观, también conocido como Xu Zhiqiang, 徐志强), condenado a cuatro años en el 2016 por ejercer su derecho a la libertad de expresión y de reunión. Xu fue encarcelado durante un año después de haber participado en el movimiento de 1989, mientras que él era un estudiante en Xi'an.
- El miembro del Partido Demócrata Chino Chen Shuqing (陈树庆) de Hangzhou, condenado a 10 años y medio en el 2016 por sus actividades pro derechos humanos. En 1989, Chen participo en el movimiento cuando todavía era un estudiante universitario.
- El miembro del Partido Demócrata Chino Lü Gengsong (吕耿松) está cumpliendo una condena de 11 años impuesta en 2016 por sus actividades pro-democracia. Lü era un maestro en Hangzhou, expulsado en 1993 por su apoyo al movimiento democrático.
- El activista de Sichuan Chen Yunfei (陈云飞) condenado a cuatro años en el 2017 por organizar una ceremonia en memoria de las víctimas del 4 de junio. Chen asistió al movimiento de 1989 como un estudiante en la Universidad de Ciencias Agrícolas en Beijing.
Procesado y en espera de veredicto (1):
-Las autoridades de Guangzhou han reenviado a juicio al activista Liu Shaoming (刘少明) en abril de 2016 con la acusación de haber “fomentado la rebelión” hacia las autoridades estatales, en una serie de artículos publicados en red y dedicados a los hechos de 1989. Liu transcurrió un año de cárcel por haber participado en las demostraciones de 1989.
En cárcel en espera de proceso (2):
-Las autoridades de Chongqing en mayo de 2016 arrestaron al activista Jiang Yefei (姜野飞), porque sospechado de actividades “subversivas hacia los poderes del Estado” y por haber “organizado otras actividades ilegales” a los largo de la frontera después de haber sido deportado de Tailandia en noviembre de 2015 y no obstante hubiese recibido el status de refugiado por la Onu. Él participó como estudiante en el movimiento de 1989.
-El activista de Sichuan Chen Bing (陈兵) fue investigado en abril de 2017 junto a otras 3 personas con la acusación de “incitación a la subversión” contra el poder del Estado. Él habría contribuido en la producción y difusión de botellas de vino que aludían a la memoria del 4 de junio. Chen era un estudiante en Nanchong, en Sichuan y participó en el movimiento de 1989. Él es hermano mellizo de Chen Wei (ver arriba).
Condenados y en libertad vigilada o con penas suspendidas (3):
-La célebre periodista Gao Yu (高瑜) está descontando una condena a cinco años fuera de la prisión de Beijing, después de haber recibido un permiso médico en noviembre de 2015. En un primer momento había recibido una condena a 7 años en abril de 2015 por haber pedido libertad de prensa. Gao se unió a la protesta de 1989 y escribió diversos artículos de crítica sobre la represión del gobierno, por esto fue arrestada dos veces en el pasado y ya descontó 6 años de cárcel.
-El abogado pro derechos humanos con base en Beijing Pu Zhiqiang (浦志强) recibió una condena a 3 años (suspendida) en diciembre de 2015 y fue privado de la licencia de ejercitar, a continuación de la condena. En base a la sentencia, él fue objeto de supervisión, debe referir a la policía sobre sus actividades y arriesga en cada momento ser reenviado a la prisión. Él era uno de los líderes estudiantiles en 1989 y tomó parte en la huelga de hambre de la plaza Tiananmen.
-El activista con base en Beijing Zhai Yanmin (翟岩民) recibió una pena (suspendida) de 3 años en agosto de 2016 en el contexto de la “Represión 709” contra abogados pro derechos humanos y sus seguidores. Él está obligado a usar un brazalete electrónico que señala sus desplazamientos y su libertad de comunicación y movimiento está sometido a graves restricciones. Si las autoridades los deciden, él puede terminar en cualquier momento terminar preso en base a presuntos crímenes cometidos. Zhai adhirió, cuando era estudiante, al movimiento de 1989.
04/06/2018 11:03