Tewatte: Rosario para pedir 'verdad y justicia', por las masacres de Pascua

de Melani Manel Perera

Continúa la protesta silenciosa y pacífica para exigir el esclarecimiento de los atentados del 21 de abril de 2019. Se rezaron oraciones en cingalés, tamil e inglés. Entre las intenciones, se oró pidiendo "fuerza y valor" para el clero, para que pueda seguir apoyando la lucha de su pueblo. Card. Ranjith: Es un "grito de dolor" contra un acto de "violencia sin sentido".

Colombo (AsiaNews) - Durante el fin de semana pasado, los católicos de la arquidiócesis de Colombo, con la guía y el apoyo del card. Malcolm Ranjith, rezaron el Rosario para pedir "la intercesión de la Virgen María" y exigir "verdad y justicia" para las víctimas de la masacre de Pascua de 2019. En la tarde del 21 de marzo, clérigos y religiosos se reunieron en la basílica de Nuestra Señora de Lanka, en Tewatte, con la misma intención y en el marco de las iniciativas relacionadas con el “Black Sunday” o "Domingo Negro". Una protesta silenciosa y pacífica promovida por la cúpula eclesiástica y apoyada por los fieles para cuestionar la ineficiencia y los encubrimientos que han impedido hasta ahora castigar a los verdaderos responsables de los atentados.

En el calendario, la fecha clave para los católicos - así lo señaló el cardenal de Sri Lanka- es el 21 de abril, coincidiendo con el segundo aniversario de la masacre. Si no se hace justicia, advierten, "seguiremos adelante con protestas masivas en todo el país".

Hace pocos días, el crd. Ranjith había difundido una invitación dirigida a todos los fieles del país, pidiéndoles rezar el Rosario en sus casas o en las iglesias, al final de los servicios dominicales. El cardenal presidió la oración en la basílica de Tewatte, la que fue retransmitida simultáneamente por la cadena católica Tv Verbum, y en tres idiomas diferentes. La celebración comenzó a las 19 horas con una marcha con velas encendidas y luego una procesión con la participación de sacerdotes, religiosos y religiosas de la arquidiócesis. A continuación hubo himnos y cantos para pedir la intercesión de la Virgen María.

Antes de cada decena del Rosario, el celebrante detalló brevemente la intención especial: por los dirigentes del país, para que busquen la verdad y la justicia, y por la seguridad de la nación; por el Card. Ranjith y los miembros de la Conferencia Episcopal, sacerdotes y religiosos, para que tengan la fuerza y el coraje de estar al lado del pueblo en esta lucha por la justicia; por las víctimas de los atentados, para que el Señor les conceda el descanso eterno, y consuele a sus familiares y amigos; hubo una invocación especial en cingalés, tamil e inglés, para que se esclarezca el caso y se sepa quiénes son los autores y los instigadores de las masacres de Pascua.

Al tomar la palabra, el card. Ranjith invocó al Señor pidiéndole que escuche "el grito de dolor" de su pueblo y que "haga justicia a su rebaño" por este acto de “violencia sin sentido”. “¿Cómo es posible que alguien cometa tales atrocidades en tu nombre?”, se preguntó el cardenal. El purpurado invocó a Dios para que "asuma el dolor" de un pueblo que quiere "volver a experimentar el amor" y que necesita todo el "coraje y la fuerza" necesarios para continuar en este camino "que busca la justicia".

El arzobispo de Colombo no ocultó las "enormes dificultades" que surgieron en estos dos años de búsqueda de la verdad sobre los atentados, cuyos contornos siguen "envueltos en la oscuridad". "Los hechos no se investigaron como corresponde. Los políticos interesados y las consideraciones partidistas parecen haber enfriado cualquier esfuerzo", agregó. Sin embargo, dijo, “nada es imposible para el Señor" a quien "le pedimos que haga justicia". "No importan las fuerzas [hostiles] ni los desafíos" ya que "avanzamos unidos hasta que se haga justicia".

Por último, el cardenal pidió a los sacerdotes y religiosos que permanezcan unidos y firmes en esta batalla, que responde al reclamo de todo un pueblo. "No tenemos miedo, permanecemos unidos en esta oración espiritual a nuestro Señor -concluyó el cardenal- al Señor de la justicia, al Señor del amor, para que podamos llevar a cabo nuestra misión y él nos ayude en ello." Si no se hace justicia antes del 21 de abril, "continuaremos nuestra protesta con un renovado empuje en todo el país".