Tatarstán, "consejos" de un imán sobre la violencia doméstica

de Vladimir Rozanskij

La difusión de un vídeo en la web oficial de la república caucásica sobre cómo "pegar" a su mujer ha causado conmoción en Rusia. A pesar de que el 90% de los rusos pide una ley para proteger a las mujeres, la medida sigue bloqueada en la Duma.

Moscú (AsiaNews) - La página web oficial de la república caucásica rusa de Tatarstán, Tatar-Inform, ha publicado una entrevista en vídeo durante el programa "Un té con el Khazrat" con el imán local Timur Kamaev, en la que el representante religioso explica cómo se debe pegar "correctamente" a la esposa. En su opinión, no hay que "empezar a pegar inmediatamente, al principio hay que probar con exhortaciones, luego negarse a dormir juntos, para que la mujer empiece a reflexionar sobre los errores que está cometiendo". Si ninguno de estos procedimientos da resultado, entonces es el momento de "pasar a los golpes".

El término 'palizas', explica Kamaev, es diferente de los 'golpes' propiamente dichos, se repite en el āyāt del Qur'ān como método para que la esposa se dé cuenta de que está haciendo algo mal, y deben existir las 'gradaciones adecuadas: se puede utilizar un siwak' -un palo ligero- 'y con él dar un par de pequeños golpes de forma precisa, cuando el brazo se mueve sólo desde el codo, no con todos los músculos desde el hombro'. El gesto es mostrado directamente por el imán durante la entrevista, expresando también en su rostro 'el descontento de su marido por verse obligado a llegar a tales extremos'.

Tras la entrevista, que causó un gran escándalo, el propio imán Timur rebatió la interpretación, que según él estaba 'sacada de contexto', ya que había dicho en repetidas ocasiones que 'la mujer no debe ser golpeada bajo ninguna circunstancia'. Los castigos recomendados son, por el contrario, una forma "simbólica" de llamar al orden a su mujer, y ahí radica el sentido de otra frase que pronunció, según la cual "hay que golpear para no dejar marca". En cambio, la violencia real "es condenada por el Corán como un pecado" y las mujeres víctimas de violencia deben denunciar inmediatamente a sus maridos ante las autoridades religiosas y policiales.

En la propia página web, la entrevista va acompañada de una encuesta sociológica, según la cual casi el 90% de los rusos apoya la necesidad de una ley contra la violencia doméstica. Una variante de ésta ya se debatió en la Duma, pero también fue bloqueada debido a la oposición expresada por las comunidades religiosas, no sólo musulmanas, sino también ortodoxas del Patriarcado de Moscú.

En el debate parlamentario, la dirección pidió a los diputados que no utilizaran como tema la violencia de los soldados que regresan del frente en Ucrania, sino que hablaran de la violencia doméstica en general, y en cualquier caso la discusión se cortó de forma bastante abrupta. Desde el Kremlin llegaron comentarios que insinuaban un acuerdo directo entre el Presidente Vladimir Putin y el Patriarca de Moscú Kirill para suspender las iniciativas legislativas sobre violencia doméstica.

Tras la polémica entrevista con el imán Kamaev, la administración religiosa de los musulmanes de Tatarstán no desmintió a su representante, pero invitó a "escuchar la versión completa" de la conversación, confirmando que "confirmar el dolor físico o moral es un pecado condenado por el Islam". El vídeo fue eliminado por Tatar-Inform, pero se difundió ampliamente en otras plataformas, como YouTube y Telegram, dividiendo a los usuarios entre críticos y partidarios.

El presidente de la Comisión Patriarcal para Asuntos Familiares, Defensa de la Maternidad y la Infancia, el padre Fëdor Lukjanov, comentó condenando todas las formas de violencia entre cónyuges, pero reiteró que las iniciativas legislativas no deben "inmiscuirse en el espacio sagrado de la familia". Por el contrario, desde 2017 existe una ley, firmada por Putin a sugerencia del Patriarca Kirill, sobre la "despenalización de los conflictos domésticos".