Sulawesi Central: detienen 24 sospechosos de terrorismo
La policía también incautó machetes y rifles de aire comprimido. Los presuntos delincuentes son miembros de los Muyahidines de Indonesia Oriental y proceden en su mayoría de Poso, ciudad que desde hace años es el centro de la violencia sectaria.
Yakarta (AsiaNews) - La policía indonesia detuvo a 24 sospechosos de terrorismo. La operación fue dirigida por la brigada antiterrorista Densus 88 y tuvo lugar el 14 de mayo. Al menos "22 sospechosos fueron arrestados en Sulawesi Central", anunció el portavoz de la policía, el general de brigada Ahmad Ramadhan. "Un presunto terrorista fue detenido en Bekasi y otro en Kalimantan Oriental". Las fuerzas de seguridad también incautaron un revólver, 10 rifles de aire comprimido y 26 machetes.
La mayoría de los presuntos terroristas proceden de Poso, una ciudad de Sulawesi Central que desde hace años es el centro de la violencia sectaria entre musulmanes y cristianos. Ocultos en las montañas, los Muyahidines de Indonesia Oriental (MIT), afiliados al Estado Islámico, se entrenan y llevan a cabo ataques contra la población civil y las fuerzas policiales locales. Después del atentado de Bali en 2002, en el que murieron principalmente extranjeros, actualmente los terroristas prefieren los ataques dirigidos contra el gobierno y las minorías. En noviembre de 2020, hallaron muertos a cuatro agricultores cristianos de etnia toraja. En diciembre de 2021, otros cuatro fieles fueron asesinados y decapitados.
Desde 2016, las fuerzas antiterroristas indonesias han llevado a cabo una serie de operaciones contra la red terrorista y neutralizaron al líder Abu Warda Santoso. El año pasado, el equipo del Denso 88 mató a su sucesor, Ali Kaliora.
Sin embargo, Poso ha sido el centro de un enfrentamiento comunal durante décadas. Entre 1998 y 2001, grupos de cristianos se enfrentaron en un sangriento conflicto que generó cientos de víctimas y miles de desplazados internos. En 2002, los acuerdos de paz de Malino (una localidad montañosa del sur de Sulawesi) pusieron fin a la violencia, pero las agrupaciones fundamentalistas musulmanas mantienen una guerra de guerrillas contra el gobierno central.