Sri Lanka, madre católica se recupera de cáncer: El amor de Jesús y la oración me salvó
Colombo (AsiaNews) - "Mi recuperación [del tumor cerebral] es el milagro más grande que he visto en toda mi vida. Él trajo tantas bendiciones para mi familia que yo no sé cómo pagar a Dios por el regalo que me dio". Así dice Noelin Rupa Fernando, líder local del Asian Integral Pastoral Approach (AsIPA), a AsiaNews que la dolorosa experiencia del tumor cerebral y la curación "milagrosa" se ha producido gracias a las "oraciones de tantas personas - amigos de la juventud, familia, vecinos, hermanos y sacerdotes de la Sagrada Familia - que me han ayudado y apoyado visitándome, animándome y orando por mí".
Noelin Rupa Fernando es una mujer católica de 48 años, madre de dos niños que asisten a la parroquia de Nuestra Señora de los Dolores en Naninamadama, en la provincia de Kochchikade. Su rutina diaria era visitar a los enfermos, a los ancianos de la parroquia y en la organización de las oraciones de la comunidad. La Sra. Rupa también ha estado siempre con el apoyo de su familia y de su esposo, quien la animó a continuar con el trabajo en la parroquia.
Hasta junio del año pasado, cuando fue hospitalizada tras sufrir un desmayo. Más control revela un cáncer grave en el hemisferio derecho del cerebro, el médico aconsejó no operar debido a la gravedad de la situación. La mujer dijo: "La decisión de la especialista me ha dejado y a mi familia totalmente sorprendidos. Nos quedamos impactados y muy triste por lo que me estaba pasando. Sentí un dolor insoportable y yo no podía imaginar cómo iba a ser capaz de hacer frente a esta situación. Le pedí a Dios: "¿Por qué sufro de una enfermedad tan grave después de todo lo que he hecho por otras personas?'".
La única solución era confiar en el amor de Jesús para que llegara un "milagro": "Le pedí a Dios tomar sobre sí mi dolor y curarme. Mantuve mi fe fuerte y empecé a rezar. Día tras día, muchas personas, especialmente mis seres queridos, oraron por mí. Y día tras día mi fe ha crecido". "La más hermosa cosa - continúa la Sra Rupa - es que todos los miembros de mi familia comenzaron a orar juntos todas las noches".
Mientras tanto Noelin comenzó un curso de tratamiento con la técnica de la radioterapia en el Hospital del Cáncer en Maharagama, centro especializado para el tratamiento del cáncer. El tratamiento le llevó a pasar mucho tiempo en el hospital, donde fue asistido constantemente por su hija, y luego volver a casa cada fin de semana. "No, yo nunca he experimentado tan intenso amor de Jesús como en los que estaban a mi alrededor. Aunque la enfermedad fue terrible, se ha creado algo bueno".
La semana pasada, la mujer volvió al especialista, el Dr. Sunil Perera, quien comparó el último análisis con el que mostró el cáncer. La Sra. Rupa no pudo contener las lágrimas cuando el médico le ha informado de que el tumor había desaparecido: "Pero eran lágrimas de alegría".
"Yo sé una cosa: que la enfermedad ha sido una buena lección para mi familia, para mis amigos y para mi pueblo. Estoy muy feliz de ser sanado y por todas estas cosas que siento que he experimentado el amor de Dios. Tengo que agradecer a todos los que me ayudaron y pedir la bendición de Dios sobre ellos", dice la mujer. Aunque está un poco "triste", porque no soy capaz de hacer lo mismo en casa como antes, sin embargo, la felicidad y la alegría se desborda, porque he sido el objeto del amor de Jesús que me hizo sanar de esta manera".
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