Sor Prema: Madre Teresa, dónanos tu fidelidad a Dios y a los pobres

de Mary Prema*

Hoy recurre el 109 aniversario aniversario del nacimiento de la santa de Calcuta, patrona del voluntariado. La superiora general de las Misioneras de la Caridad recuerda la “fidelidad” de Madre Teresa a la llamada de Dios que le pide servirlo en el rostro de los pobres. Madre Teresa “defensora del derecho a la vida de los niños abortados, abandonados y discapacitados”.

Calcuta (AsiaNews) – “Nuestra Madre carísima, dónanos una parte de tu fidellidad a Dios y

a los más pobres entre los pobres”. Lo afirma sor Mary Prema, superiora general de las Misioneras de la Caridad, en un mensaje difundido en el día en el cual recurre el 109mo aniversario del nacimiento de Madre Teresa de Calcuta. Ella recuerda la “fidelidad” de la santa a las promesas bautismales, a la llamada de Dios, a lo pobres, al servicio de los últimos de la sociedad, los “descartados” de los cuales habla a menudo el Papa Francisco. A continuación el recuerdo de sor Prema (traducción a cargo de AsiaNews).

Quisiera compartir con vosotros mis reflexiones sobre una convicción de la Madre: “Dios no me llamó para tener suceso. Él me llamó para ser fiel”.

Me maravillaba de cómo la Madre aceptase el suceso y el fracaso con la misma serenidad y alegría.

Ella mo se preocupaba del suceso, de la riqueza, de la gloria y del poder. Ella sabía que Dios la había llamado y que Dios era siempre fiel. La cultura albanesa la educó a mantener la palabra dada, hasta a cuesta de la propia vida. La Madre era fiel a lo que su madre el había enseñado.

Era fiel a la promesa bautismal de servir a Dios en la Iglesia católica.

Era fiel a su llamada de pertenecer sólo a Jesús como religiosa.

Era fiel a la llamada de Dios a servirlo en los más pobres entre los pobres en India y en todo el mundo.

Ponía plena confianza en la Providencia de Dios por todo aquello de los cual necesitaba en su servicio.

Amaba fielmente a todos y no cerró jamás su corazón a nadie, sobre todo a aquellos que la herían.

Su fidelidad en los momentos fáciles y en aquellos difíciles fue bendecida por Dios con extraordinaria fecundidad.

Se convirtió en defensora del derecho a la vida de los niños abortados, abandonados y discapacitados.

Se convirtió en la Madre de los no deseados y de aquellos que venían considerados inútiles y un peso para la sociedad.

Se convirtió en un ícono del amor tierno y cariñoso de Dios.

Era fiel en el dedicarse a sí misma al servizio más humilde, tanto que en 1985 el secretario de las naciones Unidas. Pérez de Cuellar la definió como “La mujer más potente del mundo”.

Nostra Madre queridísima, hoy, en el día de tu cumpleaños, te pedimos que nos dones una parte de tu felicidad a Dios y a los más pobres entre los pobres.

*Superiora general de las Misioneras de la Caridad