Social, solidario, reformista: carta abierta de intelectuales y activistas, por un nuevo Irán

La carta lleva la firma de más de 400 estudiantes y personalidades académicas. En ella, se expresa el deseo de que en el futuro se llegue a una solución “unitaria” para afrontar y resolver la situación crítica que atraviesa el país. Reforzar el multiculturalismo y las reformas en el ámbito social, cimentándose en la solidaridad. En la web, actores y celebridades difunden una campaña contra las sanciones de los EEUU: Trump miente, golpean a los más débiles.

Teherán (AsiaNews) – Más de 400 intelectuales y activistas, sumando docentes universitarios y estudiantes, publicaron una carta abierta en la que piden un nuevo camino de desarrollo para Irán, actualmente amenazado por las sanciones occidentales y por una teocracia cerrada a la confrontación. En su misiva, dirigida a “al cuerpo académico, docentes y miembros de la sociedad civil”, los promotores expresan su deseo de que, a futuro, haya una “profunda revisión” de la política dominante y una solución “unitaria” que permita resolver la “situación crítica” que atraviesa en este momento la República islámica.

La difusión de la carta abierta se hizo a través del sitio web Kalemeh, cercano al “Movimiento verde” iraní, emblema de la corriente reformista en el país. Los firmantes subrayan que una de las “estrategias de salida” de la actual situación de “crisis” es la “total revisión de las escuelas de pensamiento dominantes” (que muchas veces surgen del ala clerical, religiosa y conservadora), con el objetivo de “reformar” las infraestructuras políticas, sociales y económicas”.

Los intelectuales sostienen que el peligro actual es la “amenaza” de la “aniquilación” que se cierne sobre “todos los iraníes”. Es por ello que manifiestan el deseo de un “reforzamiento de lazos” entre los miembros de la sociedad, para poder emprender una “acción colectiva” que siga detenidamente las “cuestiones sociales”. Además, es necesario “transformar el diálogo nacional” en un “programa de reformas” que esté caracterizado por “una agenda, con temas específicos”.

“Necesitamos hacer una revisión del pensamiento político dominante –agregan los firmantes-, que en lugar de apuntar a grandes cambios en la política, refuerce una reforma [desplegada] desde la base, prestando atención a lo social. Un movimiento que abra los estrechos corredores y la oscuridad de las universidades a la sociedad civil y a las personas”. La carta abierta se concluye con el deseo de que Irán pueda ir poniéndose cada vez más de pie, “basado en el multiculturalismo”, y que sea capaz de exaltar el valor de la “solidaridad, y no los mecanismo represivos y destructivos” puestos en acto hasta ahora por el Estado.

Además de intelectuales, académicos y estudiantes, en la República islámica también están surgiendo iniciativas en común para oponerse a la sanciones recientemente promovidas por los Estados Unidos, que ya están ocasionando gravísimos daños a la población. Una de ellas es #SanctionsTargetMe, un movimiento que reúne a distintas celebridades y que denuncia –entre otras- la alarmante carencia de fármacos que son indispensables para salvar vidas en el país.

Llevada adelante por los actores Reza Kianian y Parviz Parastui, la campaña levanta el dedo acusatorio contra el presidente de los EEUU, Donald Trump, señalando que él miente cuando afirma que “con las sanciones no se ven afectadas la asistencia humanitaria ni los medicamentos”. Las sanciones, advierten ellos, minan “las transacciones financieras” y socavan desde lo más profundo “el bienestar” y la estabilidad de gran parte de la población.

En el mes de mayo, la Casa Blanca ordenó el retiro del acuerdo en materia nuclear (JCPOA) que había sido impulsado por su predecesor Barack Obama, introduciendo las sanciones más duras de la historia contra Teherán. Una decisión que ha provocado una caída significativa de la economía iraní –confirmada por estudios del Fondo Monetario Internacional (FMI) – y un derrumbe en las ventas del petróleo, objetivo al que apunta la segunda ronda de sanciones, que ha entrado en vigencia el 5 de noviembre pasado.