Sialkot, hospital católico ofrece atención gratuita a los enfermos de tuberculosis (Video)

de Kamran Chaudhry

El Bethania Hospital está dirigido por la arquidiócesis de Lahore. Los médicos están comprometidos en combatir la marginación social que sufren los enfermos. La estructura organiza programas para informar a los habitantes sobre el virus. Cada año mueren en el país unas 70.000 personas a causa de la TBC.

Sialkot (AsiaNews)- El Bethania Hospital de Sialkot, en el Punjab paquistaní, ofrece atención médica gratuita a los ciudadanos pobres que están enfermos de tuberculosis. La estructura es el único hospital católico está bajo la dirección de la arquidiócesis de Lahore. Desde hace 52 años que los médicos y los operadores sanitariosse comprometen en la lucha contra el estigma social que margina a quienes están infectados por la enfermedad, y que a menudo son abandonados por sus mismos familiares, una vez que se manifiesta el contagio.

El Pbro.Robin Bashir, director del hospital, dice a AsiaNews: “Los habitantes del lugar consideran a estos pacientes como “intocables”. Sus ropas, y los utensilios que usan todos los días, son separados por los otros miembros de la familia. Las mujeres que no están casadas piden ser visitadas en secreto”. El sacerdote explica que las mujeres prefieren no someterse al tratamiento, con tal de evitar la discriminación por parte de la sociedad. Este es el motivo, dice, por el cual “nuestro sector de ginecología está vacío”.

El año pasado, continúa el director, “un hombre vino al hospital con su esposa, quien luego fue internada. Él pagó los honorarios de los médicos y al día siguiente le envió a su mujer el pedido de divorcio.

Además de trabajar en el ámbito de la salud, el Pbro. Bashir trata de contrastar la discriminación a través de la educación. El personal del hospital organiza seminarios y encuentros dirigidos a la población de las aldeas y va a visitar a los pacientes a sus casas. Los programas se orientan a aumentar la conciencia de la enfermedad, dice, y “son uno de los servicios más importantes brindados por el hospital”.

Nacidos como un pequeño dispensario, el centro está provisto de 134 camas, con departamentos separados para fisioterapia, una escuela de enfermería, un centro para la lucha contra la obesidad y varios quirófanos. Cada día atienden a unos doscientos pacientes, la mayor parte de los cuales profesan la religión musulmana.

En 1991 el gobierno de Pakistán reconoció la enorme contribución que dicho centro ha dado a la nación y lo reconoció como institución caritativa, concediéndole una reducción de impuestos de hasta el 50%. El hospital también está incluido entre los centros que abastecen la medicación provista por el Programa nacional de control de la tuberculosis.

Según los datos más recientes, Pakistán ocupa el sexto lugar en la clasificación de los 22 países en donde el riesgo de contagio es mayor. Sobre una población de más de 180 millones de habitantes, 430.000 están afectados por la enfermedad, de los cuales 15.000 son menores de 18 años; cada año mueren de TBC unas 70.000 personas.

Adnan Ahmad, un paciente de 32 años, cuenta que durante dos años trató -en vano- de curarse de la enfermedad yendo a varios herboristas. Luego, un día “escuchó hablar de este hospital misionero. Los cristianos están ayudando a los pobres de una manera excepcional”