Seis pescadores de Sri Lanka salvados de los piratas somalíes están varados en las Seychelles
El propietario del “Lorenzo Putha-4” Francis Milroy Perera ha denunciado públicamente la situación. El ataque se produjo el 27 de enero, pero la intervención de la Guardia Costera de Seychelles frustró la operación. Sin embargo, el gobierno todavía no ha tomado las medidas necesarias para que permitan la repatriación. El pedido a AsiaNews de la madre del capitán.
Colombo (AsiaNews) - El barco y los seis tripulantes que salvó la Guardia Costera de las Seychelles del ataque de piratas somalíes, "todavía están anclados en Port Victoria" y no se sabe qué pasa con ellos. El propietario del "Lorenzo Putha-4", Francis Milroy Perera, denunció hoy la situación y reclamó un mayor compromiso de las instituciones para desbloquearla, porque corre el riesgo de continuar indefinidamente. “Los procedimientos legales - explica a AsiaNews - que puso en marcha nuestro gobierno para traerlos de vuelta al país son muy lentos. Ya no sé a qué otra autoridad acudir, he ido a todos los lugares posibles” para defender el caso y acelerar el regreso.
En un mensaje de vídeo que recibió el propietario y hoy se mostró a la prensa, los pescadores afirman que "no tiene ningún sentido que nos quedemos aquí. No tenemos nada que hacer y tampoco hemos hecho nada malo. Pedimos encarecidamente a todos que tomen las medidas necesarias para sacarnos de este lugar” y nos permitan volver a casa. “Nuestros seis pescadores - dice Francis Milroy Perera - y el barco fueron salvados de los piratas somalíes por la guardia costera de las Seychelles, pero todavía siguen atracados” allá, cuando ya ha pasado “exactamente un mes” del ataque. “Nos preguntamos – añade – por qué nuestro gobierno es tan reacio a darnos el apoyo que hace falta, en el momento en que realmente lo necesitamos” cuando “nosotros, como comunidad [de pescadores], aportamos muchos recursos al país”.
Ayer el propietario se reunió con algunos responsables de la dirección general del ministerio de Relaciones Exteriores, quienes afirmaron que "lleva tiempo" resolver el asunto y "en dos o tres días sabremos exactamente cuándo podremos traerlos de regreso a Sri Lanka". Palabras que no lo tranquilizan, e insiste en que ya ha pasado un mes desde el ataque pirata - el 27 de enero - y la intervención providencial de la guardia costera. Hay un "grave retraso" en la adopción de medidas concretas para rescatar a los pescadores y su embarcación, del que son responsables el ministerio de Relaciones Exteriores y el ministerio de Pesca, considerando los costos e impuestos que se han pagado regularmente para poder operar. "Pagamos una enorme cantidad de dinero y aportamos ingresos para el país", añadió Francis Milroy, pero "no hacen nada para ayudarnos cuando estamos en problemas".
El barco había zarpado de Chilaw el 27 de enero y debía navegar por el Mar Arábigo junto con otros dos barcos, pero durante la navegación fueron atacados por piratas. Uno de los tripulantes envió un mensaje donde habla de "un barco iraní que se acerca", pero en realidad se trataba de "piratas somalíes armados". La tripulación consiguió informar su posición y lanzar una señal, lo que permitió la intervención de la guardia costera de Seychelles, que abordó la nave y tomó el control, ahuyentando a los piratas.
En una videoconferencia de dos semanas atrás, Rakitha Dushan, el capitán del "Lorenzo Putha-4", contó que "recibimos comida, pero nos cuesta comer" y "nos limitamos a tragar algo para calmar el hambre". Consultada por AsiaNews, la madre de Dushan afirma que "estamos todos nerviosos hasta que veamos a nuestros hijos. Rakith es mi hijo. Mi yerno también está con ellos. Ahora nuestras familias también enfrentan problemas económicos. Hace un mes que no tienen trabajo" y le corresponde al gobierno "hacer lo que sea necesario para que vuelvan pronto".