Se mantiene la frágil tregua de la ONU en Yemen. Esperanza de paz por los coloquios en Kuwait

Según un vocero de las Naciones Unidas, el cese del fuego “parece funcionar en gran parte”, no obstante ha habido “algunos episodios de violencia”. Diplomático ONU: la perspectiva es “más significativa” para los coloquios entre las partes. En el centro de las tratativas, el retiro de las milicias y de los grupos armados, y el restablecimiento de las instituciones estatales.

Saná (AsiaNews/Agencias) – Parece mantenerse el cese del fuego iniciado ayer en Yemen, teatro desde hace más de un año, de una sangrienta guerra entre la coalición liderada por los sauditas –que apoya a las fuerzas gubernamentales- y los rebeldes Houthi, cercanos a Irán. La tregua entró en vigencia a la medianoche del 11 de abril y, según cuanto refiere un vocero de la ONU, ”el cese de las hostilidades parece funcionar en gran parte” del país. Sin embargo, agrega que se han verificado “algunos episodios de violencia” en determinadas áreas.

Fuentes locales hablan de violaciones al cese del fuego por parte de los rebeldes alrededor de Taez; los Houthi simultáneamente denuncian “al menos un ataque aéreo” de la coalición saudita en la misma provincia al este de la capital, Saná.

La tregua debiera allanar el camino para los coloquios de paz previstos para el próximo 18 de abril en Kuwait, y permitir la entrega de ayuda humanitaria en las áreas que se encuentran asediadas.

Según fuentes de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la guerra han muerto más de 6.200 personas, ha habido al menos dos millones de desplazados en un año de combates; para las Naciones Unidas hay un fuerte riesgo de que se produzca una “catástrofe humanitaria” en Yemen.

Los responsables de las Naciones Unidas en el país esperan que haya ulteriores progresos por la vía de la paz porque –un primer intento de negociaciones fracasó- Arabia Saudita parece más inclinada a entablar tratativas para lograr el fin del conflicto. “Hay una perspectiva muy significativa –declaró un diplomático del Consejo de Seguridad de la ONU- para los coloquios [de paz]”.

Los encuentros de paz estarán focalizados en cinco áreas en particular: el retiro de las milicias y de los grupos armados; la entrega de armamento pesado al Estado; medidas de seguridad provisorias; restablecimiento de las instituciones estatales; retomar un diálogo político inclusivo.

Desde enero del año pasado, la nación del Golfo es teatro de un sangriento conflicto interno que ve oponerse a la plana de líderes sunitas, apoyada por Arabia Saudita, y a los rebeldes Houthi, cercanos a Irán. En el mes de marzo, los sauditas, que encabezan una coalición, lanzaron ataques aéreos contra los rebeldes, en un intento por liberar la capital, Saná, y volver a entregar el país al presidentes (antes en el exilio, ahora de regreso), Abdu Rabu Mansour Hadi.

Para Arabia Saudita los Houthi, aliados a las fuerzas fieles al ex presidente Ali Abdullah Saleh, son apoyados en el plano militar por Irán; una acusación que Teherán rechaza. En el país se encuentran activos, además grupos extremistas vinculados a al Qaeda y milicias yihadistas ligadas al Estado Islámico, que han contribuido a aumentar la espiral de violencia y terror.