Se intenta iniciar un proceso de destitución contra el presidente Duterte
El diputado Gary Alejano afirma: “Duterte es inadecuado para cubrir el cargo más alto del país”. El parlamentario acusa al presidente por los homicidios extra-judiciales durante su actual mandato y mientras se desempeñaba como intendente de Davao, sumando casi 10.000 víctimas en total. También se denuncia la incorporación de 11.000 empleados fantasma y la apropiación indebida de cerca de 40 millones de euros.
Manila (AsiaNews) – Luego de tan sólo nueve meses en el cargo, el presidente filipino Duterte afronta el primer tentativo de impeachment. Gary Alejano, parlamentario de Magdalo y ex capitán de las fuerzas armadas, ayer presentó una denuncia contra Duterte en el despacho del secretario de la Cámara de representantes. Entre las acusaciones, figuran la violación de la Constitución, concusión, corrupción, traición de la confianza pública y otros delitos graves.
En una conferencia de prensa, Gary Alejano presentó un documento de 16 páginas sosteniendo sus acusaciones y explicó las razones de su accionar. El parlamentario declaró ante los cronistas presentes: “Estamos firmemente convencidos de que el presidente Duterte es inadecuado para cubrir el cargo más alto del país, y que el proceso de destitución es el remedio jurídico y constitucional para esta situación”.
Gary Alejano es un ex capitán de la Marina que participó, junto a varios oficiales jóvenes, en dos intentos de golpe de Estado fallidos, en el 2003 y en el 2007, liderados por el teniente de navío Antonio Trillanes IV, actualmente senador, contra la entonces presidente Gloria Macapagal-Arroyo. Fuentes de AsiaNews recuerdan cómo los militares intentaron derrocar a Arroyo, quien antes de ello había sorteado tres tentativos de llevar adelante procesos de destitución, motivados por un fuerte sentimiento de rechazo a la corrupción y las fuertes desigualdades sociales, en un país que estaba pasando por un período de un importante crecimiento económico.
Alejano responde de esta manera a quien insinúa que el suyo en un mero intento de desestabilizar la administración de Duterte: “No hay nada de ilegal en esto. No estamos montando en escena un golpe de Estado ni ningún otro medio para expulsar a Duterte”. El documento presentado por el parlamentario acusa al presidente filipino por su “política de Estado” que ha empujado a policías, a otras fuerzas del orden y a grupos de vigilancia a dar muerte a más de 8.000 personas “por la sola sospecha de haber cometido delitos vinculados a la droga”.
Basándose en testimonios presentados ante el senado por los asesinos confesos Edgar Matobato y Arturo Lascañas, Gary Alejano imputa a Duterte de ser el cerebro detrás de los llamados Escuadrones de la muerte de Davao (DDS), responsables de haber asesinado a cerca de 1400 drogadictos cuando el actual presidente se desempeñaba como intendente de la ciudad.
Alejano sostiene que Duterte también debería ser sometido a un proceso por concusión y corrupción, a raíz de la incorporación de cerca de 11.000 presuntos “empleados fantasma” mientras era intendente de la ciudad de Davao. Por último, el diputado acusa al presidente de haber acumulado casi 40 millones de euros en presuntas riquezas ocultas en transacciones bancarias no declaradas. Para apoyar la hipótesis del delito, el ex militar adjunta al documento las copias de dichas transacciones. El caso ya había sido planteado por el senador Trillanes durante la campaña electoral presidencial.
Para poder llevar adelante las acusaciones contra el presidente, es necesario obtener el voto a favor de cuando menos un tercio de los 292 miembros de la Cámara de representantes. Con más de 260 legisladores que pertenecen a un bloque partidario de Duterte, Alejano reconoce que su intento de iniciar un proceso de destitución es emprender un "camino cuesta arriba".
04/09/2018 17:22