Salarios pendientes de pago: la desesperación de los trabajadores

Nunca tantas amenazas de suicidio. La China Labour Bulletin publica datos para agosto y septiembre. Cada vez hay más protestas por la quiebra fraudulenta y empresarios defendidos por el Estado.

Beijing (AsiaNews / CLB) - Nunca tantas trabajadores en el sector de la construcción había amenazado con suicidarse en protesta por los retrasos en el pago de salarios. Esto fue revelado por el China Labour Bulletin, una ONG con sede en Hong Kong, que publicó los datos para agosto y septiembre de 2016. Las dos meses se han registrado como cifras récord.

En concreto, la ONG afirma que en agosto hubo cerca de 100 incidentes y acciones colectivas de protesta de los trabajadores de la construcción. Todos en protesta contra los pagos atrasados. Los incidentes han aumentado a medida que nos acercamos a la "Semana de oro", la temporada de vacaciones que se inició el primer octubre pasado. Los trabajadores migrantes, de hecho, no quieren irse a casa con las manos vacías, después de una serie de proyectos que han fracasado y muchos jefes empresariales se han negado a pagar a los empleados.

Tres casos de intento de suicidio se llevaron a cabo entre el 14 y el 15 de agosto en Neijiang (Sichuan). 14 bomberos intervinieron porque una mujer estaba amenazando con saltar desde el tejado de un edificio de 31 pisos. La trabajadora se quejaba de los salarios pendientes de pago. Los agentes la han convencido de que ella descienda.

A la mañana siguiente, un grupo de cinco trabajadores se subió a la azotea del mismo edificio. Se sentaron en la cornisa a beber alcohol, y descendieron sólo después de que los bomberos les han rogado llevar su queja ante el gobierno local.

Los trabajadores que han recurrido a las autoridades no han recibido ninguna respuesta. En el distrito de Fengtai (Anhui) algunos de ellos han ocupado el centro de la defensa de los derechos de los trabajadores, después de que nadie ha escuchado sus quejas sobre los salarios pendientes de pago. Los trabajadores entonces organizaron un plantón frente a la oficina, acusando a las autoridades sociales de cobijar a empresarios deshonestos.

El tribunal de Fengtai respondió en su Weibo (el Facebook chino), invitando a los trabajadores a poner su confianza en el sistema legal. Ellos respondieron: "Durante mucho tiempo, el gobierno local no ha protegido los derechos de los trabajadores migrantes. No podemos confiar incluso el Centro para la Defensa de los Derechos".

De acuerdo con China Labour Bulletin, en agosto hubo 85 huelgas en el sector de la construcción; en septiembre se elevó a 95.

Por tradición, con la cercanía de las vacaciones en China son saldada las cuentas atrasadas y pagadas sus deudas. Pero cada vez más los migrantes que construyen en las ciudades - cientos de millones de personas, verdadero motor de crecimiento del PIB – ven que se les niega el pago retroactivo. Muchos, por vergüenza, se suicidan en lugar de volver a casa con las manos vacías. Alrededor del 30% de las huelgas y las protestas de los trabajadores está ligadas precisamente a la construcción, una de las zonas más sensibles de la economía china, que en el pasado ha registrado una buena parte del asombroso crecimiento del país, pero que ahora vive un fuerte momento de crisis.