Riad celebra su astronauta, pero detiene y condena a mujeres que defienden sus derechos
Mientras termina la misión de Rayyanah Barnawi, la primera mujer saudita en el espacio, en tierra continúa la represión: Fátima al-Shawarbi fue condenada a 30 años por publicar en Internet mensajes en defensa de los presos políticos. Manahel al-Otaibi terminó en la cárcel y a la espera de juicio por pedir el fin de la tutela masculina.
Riad (AsiaNews) - El reino wahabita celebra la conclusión de la primera misión espacial de una mujer saudita, pero dentro de sus fronteras continúa reprimiendo con arrestos y largas sentencias de prisión a las ciudadanas que defienden los derechos de las mujeres. La propaganda de Riad celebra el camino de reformas y liberalización patrocinado por el príncipe heredero Mohammad bin Salman (MBS), pero los beneficios para las mujeres son en gran medida una fachada, salvo el derecho a conducir y la apertura a ciertas actividades profesionales. Porque cuando se trata de la verdadera igualdad, el camino todavía es largo y el mero activismo puede llevar a la cárcel.
Prueba de ello es el caso de Fatima al-Shawarbi, condenada a más de 30 años de cárcel por haber publicado algunos mensajes "anónimos" en la web y en las redes sociales en defensa de los presos políticos, los derechos de las mujeres y contra el desempleo. La denuncia procede de Alqst, un sitio web especializado en detallar las represiones y violaciones de derechos en el reino saudita: la joven es originaria de la provincia de Al-Asha y tiene menos de 30 años. Los jueces en lo penal (SCC) le impusieron además una prohibición para viajar por 30 años y seis meses.
Shawarbi utilizó presuntamente una cuenta anónima de Twitter para denunciar las violaciones que se cometieron contra los howeitat, una tribu de Arabia Saudita víctima de represión y desplazamiento forzoso por parte del gobierno para la construcción del megaproyecto Neom. La activista, desde su cuenta anónima, habría pedido que se revelara su identidad y se denunciara su desaparición si no publicaba mensajes durante más de un mes. Fuentes locales de Middle East Eye (MME) afirman que fue detenida en noviembre de 2020 y condenada a principios de 2023, pero la noticia no ha trascendido hasta hace unos días.
La detención de Manahel al-Otaibi (en la foto), de 29 años, se remonta a noviembre del año pasado, pero también en este caso la noticia ha trascendido recientemente. Fue acusada de promover en Internet un hashtag para pedir que se acabe con la tutela masculina. Conocida por su activismo en favor de los derechos de las mujeres, fue detenida y encarcelada por difundir mensajes y peticiones desde sus cuentas de Twitter y Snapchat, lo que le valió el arresto por parte de las autoridades de Riad. De profesión profesora de gimnasia, en el pasado hizo campaña en varias ocasiones en favor de la emancipación de la mujer, acuñando el lema #societyisready. Por el momento, no hay juicios pendientes ni condenas firmes contra ella, por lo que permanece en una celda en prisión preventiva, a la espera de juicio. Sin embargo, los antecedentes no hablan a su favor, ya que en el pasado, por hechos similares, se juzgó y condenó por "sedición" a las mujeres acusadas, incluidas aquellas que luchaban por sus derechos de sucesión o por poner fin a su matrimonio con un marido violento.
Fátima al-Shawarbi y Manahel al-Otaibi son sólo las últimas de una larga lista de mujeres detenidas y condenadas por su lucha en favor de sus derechos a través de las redes sociales e Internet. La represión se recrudeció el pasado agosto cuando Salma al Shehab fue condenada a 34 años, luego reducidos a 27, por su lucha en favor del derecho de las mujeres a conducir y por pedir la liberación de Loujain al Hathloul. Nourah al-Qahtani, madre de cinco hijos, fue condenada una semana después a 45 años de prisión por tuitear desde dos cuentas anónimas. Saad Almadi, saudita-estadounidense, fue condenada a 16 años por mensajes en las redes, pena que tras una apelación se aumentó a 19 años antes de que la dejaran en libertad el pasado mes de marzo, aunque sigue aplicándosele una prohibición de viajar por 16 años. Abdullah Jelan, licenciada universitaria que soñaba con ser educadora sanitaria para el gobierno, fue condenada a 10 años de prisión, más una prohibición de viajar por 10 años, por tuits anónimos sobre el desempleo. Y, por último, continúa el juicio contra las hermanas activistas e influencers Manahel y Fouz al-Otaibi.
Estas noticias de detenciones y condenas contrastan con las celebraciones de Rayyanah Barnawi, la primera mujer árabe en el espacio que, al finalizar la misión Axiom-2, habló del "comienzo de una nueva era" en el sector. La tripulación de cuatro personas, entre ellas un ciudadano estadounidense privado (y adinerado), a bordo de la nave SpaceX Dragon Freedom aterrizó ayer frente a Florida, de regreso de la Estación Espacial Internacional (ISS). Barnawi es la primera mujer saudita que viaja al espacio, un acontecimiento celebrado como histórico y de gran valor para las mujeres sauditas, pero que no es suficiente para encubrir la continua represión contra aquellas que luchan cada día, y en su vida cotidiana, por los derechos y la libertad.
17/12/2016 13:14