Riad, piden derechos para las mujeres arrestadas

Este fin de semana crearon nuevas restricciones contra el activismo femenino. Mayaa al-Zahrani fue arrestada por haber defendido en la red social Nouf Abdulaziz al-Jerawi, detenida ya precedentemente. Riad, denuncian, quiere “suprimir a todos los activistas y a cuántos los apoyan”. Prohibidos los contactos con los abogados y sus familiares.

Riad (AsiaNews/Agenzie) – En los últimos días han sido arrestadas otras 2 activistas por los derechos de las mujeres, en el contexto de una campaña de represión que contrasta con las recientes aperturas gubernamentales, entre las cuales dieron vía libre para conducir. Lo refiere el grupo Alqst, con base en el Reino Unido y especializado en las noticias que se refieren al reino wahabita, según el cual Mayaa al-Zahrani y Nouf Abdelaziz al-Jerawi se encuentran en estado de detención.

Mayaa al-Zahrani fue arrestada por haber publicado un correo en las redes sociales de Nouf Abdulaziz al-Jerawi, una colega activista arrestada en precedencia, durante un allanamiento de las fuerzas opresoras a su habitación. Esta última había promovido campañas en favor de las mujeres oprimidas, poniéndolas en contacto con abogados y asociaciones pro derechos humanos.

En un mensaje que convirtió viral en la red, la al-Jerawi se pregunta por qué es considerada “enemiga del Estado” y una “amenaza” por su “seguridad”. Comentando la noticia de los arrestos, los exponentes de Alqst hablan de “arrestos continuos de activistas”. “Consideramos que las autoridades sauditas-agregan en la nota- están deseosas de suprimir a todos los activistas y a cuántos los apoyan.

La confirmación de los arrestos llega también del grupo pro derechos humanos “Prisioneros de conciencia”, que documenta las represiones contra los activistas por parte de Riad. “Quieren silenciar y poner detrás de las rejas” afirman, a “las voces que hablan contra ellos”. Temen “el impacto que podrían tener” estas palabras sobre el resto de la sociedad.

El mes pasado las autoridades han anunciado una serie de arrestos de activistas, detenidos con las sospechas de haber obtenido ligámenes con “entidades extranjeras” y de haber ofrecido ayuda económica a “enemigos extranjeros”. Los medios oficiales sauditas han hablado de traidores y de “agentes de embajadas extranjeras”.

Ninguno de los activistas hasta ahora detenidos no han tenido una incriminación con la oficialización de las acusaciones. Los detenidos no pueden comunicarse con el exterior, ni pueden hablar con sus familias ni con los abogados.

“El gobierno saudita considera la defensa de los derechos de los oprimidos al mismo tiempo como una traición”, afirma en una nota Yahya Assiri, líder de Alqst. “En realidad, tiene que ver con organizaciones pro derechos humanos, con medios independientes y transparentes, con embajadas y países extranjeros por el bien del país y de sus ciudadanos es patriotismo”.

El reino ultraconservador saudita, una monarquía absoluta regida por una visión fundamentalista del islam sunita, introdujo una serie de reformas en los últimos meses, en el contexto de “Vision 2030”, deseada por Mohammad bin Salman (Mbs) de 32 años. Uno de los objetivos es favorecer la ocupación femenina, llevándola del actual 22% a más del 30% dentro de 2030.

Las reformas no se refieren sólo al sector de la ocupación: en setiembre pasado fue anunciada la abolición de la prohibición de conducir (en vigor desde junio) para las mujeres y el estadio de la capital fue abierto a las representantes del gentil sexo, que pudieron asistir a las celebraciones de la fiesta nacional y a partidos de fútbol.

No obstante todo esto, permanecen todavía duras limitaciones y continúa la práctica de hacer callar y silenciar las voces de cuantos piden mayores derechos y libertades dentro de la sociedad.