26/03/2025, 19.40
PAKISTÁN
Enviar a un amigo

Represión en Baluchistán: arrestan a la activista Mahrang Baloch tras enfrentamientos con la policía

La activista Mahrang Baloch está en la cárcel desde el sábado y su hermana ha denunciado en las redes sociales las pésimas condiciones de detención. Hace pocos días algunas familias intentaron recuperar los cuerpos de sus seres queridos, pero las autoridades paquistaníes dijeron que eran los cadáveres de los terroristas baluchis responsables del ataque al tren Jaffar Express. La situación degeneró con disparos contra los manifestantes desarmados que pedían la verdad sobre las personas desaparecidas, mientras que en varias ciudades de Baluchistán continúan las protestas.

 

Quetta (AsiaNews) - La represión del gobierno pakistaní en Baluchistán se está haciendo cada vez más dura tras el ataque a un tren de pasajeros por parte del Ejército de Liberación de Baluchistán (Balochistan Liberation Army, BLA). Aproximadamente una semana después del ataque al Jaffar Express, las tensiones entre la población local y las fuerzas del orden volvieron a aumentar y los enfrentamientos de los últimos días condujeron al arresto de decenas de personas, entre ellas Mahrang Baloch, nacida en 1993, conocida activista de derechos humanos y candidata al Premio Nobel de la Paz.

El 20 de marzo algunas familias acudieron al hospital público de Quetta, capital de Baluchistán, para tratar de identificar 23 cuerpos que habían sido trasladados allí por las fuerzas del orden. Tras las protestas y los enfrentamientos (al menos dos mujeres fueron golpeadas con porras por la policía), algunos familiares se llevaron cinco cadáveres. Las autoridades afirmaron que eran cuerpos de combatientes del BLA que habían matado las fuerzas del orden y recuperaron los cadáveres realizando incursiones en varias partes de la ciudad.

En los días siguientes, el Baloch Yakjehti Committee (BYC, Comité de Solidaridad Baluchi), la principal organización pacífica por la independencia baluchi en la región, organizó una serie de manifestaciones y sentadas pidiendo la verdad sobre las personas desaparecidas: desde hace tiempo. Los activistas locales intentan encender los reflectores de la opinión internacional sobre las desapariciones forzadas de jóvenes baluchis. Según la organización "Voice for Baloch Missing Persons", desde 2009 se han encontrado los cuerpos de unas 1.500 personas que se creían desaparecidas, mientras que de al menos otras 6.000 no se tienen noticias, en algunos casos desde hace décadas.

La policía pakistaní respondió de forma brutal; algunos informes afirman que los agentes abrieron fuego contra los manifestantes y mataron instantáneamente a tres personas, entre ellas un niño de 12 años. Decenas de personas resultaron heridas y se impidió deliberadamente a las ambulancias acceder a las zonas de los enfrentamientos. La situación degeneró el 22 de marzo cuando los manifestantes organizaron nuevas marchas exhibiendo los cuerpos de las personas asesinadas por la policía. Se cortaron las comunicaciones y las conexiones (lo que dificultó la reconstrucción de los hechos) y detuvieron a 150 personas acusadas de terrorismo, entre ellas Mahrang Baloch, fundadora y líder del BYC. Durante el fin de semana, varias ciudades de Baluchistán convocaron huelgas y cierres. En muchas ciudades continúan las manifestaciones para pedir la liberación de los jóvenes detenidos.

La hermana de Mahrang, Nadia Baloch, denunció las pésimas condiciones de detención de la activista, recluida en la cárcel de distrito de Hudda, en Quetta, a la que se le ha impedido hablar con su abogado. Recién ayer Mahrang pudo tener contacto con su familia. "La vida y la salud de Mahrang corren grave peligro porque está detenida junto con peligrosos criminales. Cuando se resistió, la amenazaron con ponerla en aislamiento", escribió su hermana en las redes sociales. "Se han instalado cámaras de vigilancia justo delante de su celda y su baño, y está sometida a una vigilancia constante las 24 horas del día. No tiene ninguna privacidad, ni siquiera para cuestiones personales, y ha denunciado que incluso vigilan su forma de vestir. La comida que se le proporciona es extremadamente insalubre y tememos que esté contaminada. En consecuencia, tanto Mahrang como Beebow [otra activista detenida] han enfermado. A pesar de ello, no reciben tratamiento. Tampoco se las trata como presas políticas y se les niegan sus derechos fundamentales", continuó Nadia.

Los analistas coinciden en que la táctica de Islamabad de recurrir a la represión incluso contra los movimientos pacifistas ha demostrado y sigue demostrando ser un fracaso. Las nuevas generaciones, testigos de la violencia del ejército pakistaní y sin esperanzas de que el conflicto se resuelva de forma pacífica, se sienten cada vez más atraídas por la lucha armada contra Pakistán. Y en esto, el BLA (que sólo el año pasado reivindicó más de 300 atentados) y los demás movimientos independentistas de la región podrían encontrar aliados en los movimientos terroristas activos en Pakistán -como los talibanes pakistaníes- que luchan contra Islamabad.

La insurrección en Baluchistán comenzó en 1948, cuando la región fue anexada a Pakistán de forma controvertida. Desde entonces se han producido varios levantamientos separatistas, pero a principios de la década del 2000 los grupos de combatientes empezaron a organizarse para emprender una verdadera lucha armada contra el Estado pakistaní. En los últimos años la violencia ha aumentado y los milicianos baluchis han conseguido establecer una presencia más capilar y visible en el territorio. Ahora, después de haber atacado durante mucho tiempo las actividades económicas pakistaníes y chinas, acusadas de explotar los recursos en detrimento de la población local, los combatientes del BLA parecen tener objetivos más ambiciosos.

El ataque al Jaffar Express, según varios comentaristas, no sólo ha demostrado la creciente capacidad operativa de la milicia separatista, sino que también ha marcado un punto de no retorno en las relaciones entre Islamabad y los habitantes de la etnia baluchi. Tras la intervención militar, el gobierno declaró que los insurgentes baluchis habían matado a 31 personas y que 33 terroristas habían sido eliminados. En respuesta, el BLA calificó de falsas las declaraciones del ejército pakistaní, afirmando que había matado a 214 rehenes, en su mayoría personal militar y policial que se encontraba a bordo del tren. En ambos casos, se trata de cifras que no se pueden verificar de forma independiente, lo que ha suscitado dudas sobre el verdadero alcance del ataque.

Posteriormente el BLA siguió cometiendo atentados contra las fuerzas de seguridad de Pakistán. El 16 de marzo la brigada Majeed, formada por terroristas suicidas, y el escuadrón Fateh, las fuerzas especializadas en combates directos, atacaron un convoy en la ciudad de Noski y afirmaron que habían matado a 90 soldados. Según el ejército pakistaní, el número de víctimas fue de cinco personas.

 

TAGs
Enviar a un amigo
Vista para imprimir
CLOSE X
Ver también
Baluchistán, siete muertos y 17 heridos en una manifestación a favor de los palestinos
22/05/2021 12:05
Amnistía denuncia desapariciones forzadas ordenadas por Islamabad
24/11/2021 15:18
Belucistán, encrucijada de tensiones y negocios en el centro del choque Irán-Pakistán
18/01/2024 11:01
Lahore, protestas por el activista desaparecido. Se teme por su vida (VIDEO)
12/12/2017 14:45
Los atentados en Baluchistán no detienen la Belt and Road de Beijing
08/02/2022 13:18


Newsletter

Suscríbase a la newsletter de Asia News o cambie sus preferencias

Regístrese
“L’Asia: ecco il nostro comune compito per il terzo millennio!” - Giovanni Paolo II, da “Alzatevi, andiamo”