Región del Volga: vastas tierras de cultivo arrendadas a empresas chinas
En la zona cercana a los Urales se están llevando a cabo proyectos relacionados con la Nueva Ruta de la Seda. La población local reacciona con dureza. Las autoridades negocian en secreto. El Consejo de Europa y la Comisión de Derechos Humanos de la ONU critican las condiciones impuestas a los trabajadores.
Moscú (AsiaNews) - Está en marcha un proyecto chino a gran escala para integrarse en la economía de la zona del Volga, cerca de los Urales. Los diversos emprendimientos a nivel local forman parte de la Belt and Road Initiative, la "Nueva Ruta de la Seda", que se reformula continuamente según la conveniencia y de las a menudo duras reacciones de las poblaciones locales.
El 20 de abril pasado, en la Casa de la Cultura de la población agrícola de Ryndinsk, en la provincia de Tsivilsk, en Chuvash, una región rusa europea cercana a los Urales, se debía realizar una votación entre los operadores del sector para cambiar los territorios de la zona a la categoría "industrial". El objetivo era poner en marcha proyectos agrícolas con alta tasa de inversión. En realidad, el debate puso de manifiesto que ni los inversores ni las autoridades de Chuvash tenían planes preparados, sino que estaban tratando de aprobar el mismo "proyecto Udmurtia", otra región rusa en el lado asiático de los Urales, donde los inversores chinos son los principales protagonistas.
Hace ya un año las autoridades locales habían intentado alquilar grandes extensiones de tierras de cultivo en la provincia de Tsivilsk a inversores de China, pero los habitantes locales se opusieron y el asunto se estancó. Muchos temen que los chinos pongan la tierra a disposición de sujetos que no podrían controlar. En efecto, las autoridades no han querido aclara quiénes son los propietarios de las empresas, que supuestamente operan con el dinero de los inversores de Beijing.
En un comentario a Idel.Realii, Oleg Semenov, diputado comunista del consejo provincial de Tsivilsk, observa que hasta la fecha ningún diputado conoce los detalles del proyecto, que se presenta como "un plan estatal, incluido en el presupuesto de la república de Chuvashia". "Solo sabemos que el plan se llama 'Complejo Agrícola de Udmurtia', pero no sabemos quién lo ideó, qué contiene y cómo se aplica a los chuvasianos", subrayó Semenov.
La presidenta del consejo de Tsivilsk, Veronika Fedorova, aseguró que "en el proyecto presentado sólo participarán inversores locales de Chuvash, que no tienen ninguna relación con inversores chinos". En realidad desde hace algunos años las autoridades de Chuvash colaboran en secreto con los chinos y chocan con la desconfianza local. Algunos inversores chinos ya abandonaron la región, que consideran "tóxica" para la inversión, y se trasladaron a regiones adyacentes, como la república de Tartaristán. El mismo presidente de Chuvashia, Oleg Nikolaev, calificó las perspectivas de desarrollo de los "proyectos chinos" como "bastante nebulosas".
Las maniobras chinas ya han despertado reacciones del Consejo de Europa y del Comisionado de Derechos Humanos de la ONU por las condiciones impuestas a los trabajadores en la región de Samara, también en el Volga. Sin embargo, los proyectos parecen destinados a expandirse, como resultado de los acuerdos entre el presidente Vladimir Putin y su homólogo Xi Jinping.
17/06/2022 11:46