Rangún, el monje ultra-nacionalista Wirathu: ‘Haré frente’ a la orden de arresto
El religioso será procesado por sus declaraciones “obscenas y personales” contra Aung San Suu Kyi. Hoy debía reunirse con las autoridades religiosas regionales, pero el coloquio fue aplazado. El Sangha Maha Nayaka de Estado no quiere que el monje se siga involucrando en “cuestiones seculares”.
Naipyidó (AsiaNews/Agencias) – Conocido como “el Bin Laden budista”, el monje ultra-nacionalista Wirathu (foto), “hará frente a la orden de arresto”, emitida por la policía de Myanmar hace dos días. Así lo declaró ayer el religioso, desde Rangún, donde esta tarde debía responder ante el Consejo de la Shangha, tras haber sido citado.
La orden fue emitida luego de un anuncio del ministro de Asuntos religiosos y cultura, en el cual se afirmó que el monje sería procesado por sus declaraciones “obscenas y personales” contra la consejera de Estado, Daw Aung San Suu Kyi. Mucho antes de sus ataques verbales contra la líder democrática, el monje ya era conocido por su retórica anti-islámica y por la incitación a las tensiones entre budistas y musulmanes en todo el país.
En una carta fechada el 22 de mayo pasado, el Consejo daba a conocer a Wirathu una citación judicial y lo invitaba a no dejarse involucrar en “cuestiones seculares”. La directiva provenía directamente de la máxima autoridad religiosa del país, el Sangha Maha Nayaka del Estado. Sin embargo, anoche, el Ministerio de Asuntos religiosos y Cultura anunció que a último momento, el organismo regional ha preferido aplazar el encuentro hasta una nueva fecha a establecerse, ya que “en las circunstancias actuales”, no era posible que se llevase a cabo.
Indiscreciones difundidas por los medios birmanos afirman que la policía habría procedido al arresto del monje ultranacionalista una vez terminada la reunión. La Corte del distrito Oeste de Rangún emitió una orden de arresto de Wirathu de acuerdo con el artículo 124 (a), que trata de los delitos de sedición. De ser juzgado culpable, el monje podría recibir una condena de siete a 20 años de prisión o una multa.
“Todavía no he recibido ninguna notificación sobre la orden” -afirmaba ayer por la tarde-. Si quieren llevarme, dejen que lo hagan. Haré frente a ello”. Wiratu agregó que, dado que el gobierno actualmente en el poder es democrático, no espera recibir una pena de detención extensa. “Dudo que ellos (refiriéndose al gobierno) vayan a ser tan brutales”, concluyó el monje.
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