Ramadán: con una plegaria por la serenidad y la seguridad, se inaugura el mes sagrado para el Islam
Mañana comienza el período de ayuno y oración en Arabia Saudita, los Emiratos y el Líbano. Aún se aguarda el anuncio de Khamenei en Irán y en otras naciones del Oriente Medio y del Norte de África. El gran muftí libanés espera que sea un período en el cual vuelva a hallarse la paz y la serenidad. En los Emiratos, se redujo el horario laboral y brindan consejos para quien conduce.
Beirut (AsiaNews) – Los musulmanes de todo el mundo se preparan para celebrar el mes sagrado de ayuno y oración, en el cual los fieles son llamados a abstenerse de comer y de beber desde al alba hasta la puesta del sol, y a evitar el humo y las relaciones sexuales. Según las autoridades sauditas, hoy se concluye el mes de Sha’baan y mañana, con el clarear de la luna, se inicia el primer día del Ramadán. Un anuncio análogo ha llegado en las últimas horas de las máximas autoridades sunitas del Líbano y de los Emiratos Árabes Unidos, que también concuerdan con Riad en la fecha de inicio del mes sacro. EI Gran Muftí libanés Abdul Latif Daryan se dirigió a Dios pidiendo que las próximas semanas estén “colmadas de seguridad y serenidad para todos los musulmanes”.
Durante todo el mes, los fieles podrán tomar una comida y bebida antes de la salida del sol (suhur); la comida principal se desarrolla por la noche, luego de la puesta de sol (el iftar, que rompe el ayuno). Según la tradición, en este mes Dios reveló el Corán al profeta Mahoma. El período sacro de ayuno y abstinencia se concluirá el próximo 25 de junio, con la gran fiesta de Eid al-Fitr, que se caracteriza por celebraciones y suntuosos banquetes.
El período de ayuno y oración se inaugura con el avistamiento del primer perfil de la luna nueva, que puede varias de nación en nación. Es esta la razón por la cual ya han anunciado el inicio del Ramadán –y concuerdan en la fecha- los Emiratos, el Líbano y Arabia Saudita. Aún se aguarda que se expidan los otros líderes musulmanes de Oriente Medio (léase Irak, además del Irán chiita, donde aún no se ha pronunciado al respecto el guía supremo Ali Khamenei) y del Norte de África.
Éste es uno de los cinco pilares (deberes) del islam, junto a la peregrinación a La Meca, la oración canónica, el testimonio de fe y la dispensa de limosna. Su institución se remonta al segundo año de la “egira” (622 D.C.). El periodo corresponde a la huida de Mahoma desde La Meca rumbo al oasis de Yathrib, luego rebautizado como Medina (Madinat al Nabi, ciudad del profeta), para escapar de la hostilidad de las tribus, que veían en el líder una amenaza. Él instituyó el ayuno para hacer crecer a sus seguidores en espíritu y en la moral. Por esta razón, durante el Ramadán, la tiene actos de caridad para con los pobres y enfermos. Toda persona, tras llegar a la pubertad, siempre que esté mental y físicamente sana, está obligada a seguir el precepto. La tradición quiere que el ayuno cotidiano comience en el momento en que llega a distinguirse un hilo blanco de un hilo negro. En las aldeas y en las ciudades, dicho momento es anunciado por el almuédano, que llama a todos a la oración del Al Fajr (oración de la mañana). El ayuno termina al ponerse el sol, con el Al - Magrib (oración de la puesta del sol) que habilita al iftar. Están exentas del ayuno: las personas con problemas psicológicos, los niños por debajo de la edad púber, los ancianos, los enfermos, los viajantes y las mujeres encinta, las que se encuentran en período de lactancia o aquellas que acaban de entrar en el ciclo menstrual. Quien no ayuna, igualmente debe rezar y cumplir, cada día, un acto de caridad para con los pobres. Muchos padres hacen observar a sus hijos un ayuno rápido (de medio día).
En los últimos años, el mes sagrado ha evidenciado elementos que poco tienen que ver con la fe, y que están más emparentados con el comercio y el mundo de los negocios; puesto que el mismo influye sobre las actividades económicas y comerciales de una nación. En los Emiratos, se reducen las horas de trabajo para aliviar las fatigas de la persona probada por el ayuno. Además, las autoridades han dirigido una advertencia a los conductores, explicando que el ayuno puede provocar irritabilidad y falta de concentración cuando se está al volante. Es por eso que se invita a evitar los trayectos largos o, en todo caso, recorrerlos acompañados de otros pasajeros, además de detenerse con mayor frecuencia para tomar un descanso.
17/12/2016 13:14
24/04/2020 14:01