Rakhine, el gobierno rechaza el cese del fuego ofrecido por los militantes Rohinyás

El vocero de la líder birmana Aung San Suu Kyi dijo: “No negociamos con terroristas”. El Arakan Rohingya Salvation Army (ARSA) anuncia una tregua hasta el 9 de octubre, para fines humanitarios. Ejército: hasta ahora fueron muertos casi 400 militantes islámicos. El éxodo de aproximadamente 300.000 Rohinyás rumbo al Bangladesh. Los desplazados de los grupos étnicos suman 30.000.

Yangon (AsiaNews/Agencias) – El gobierno de Myanmar rechaza el cese del fuego declarado por los militantes musulmanes Rohinyás para permitir la entrega de ayudas a miles de desplazados en el estado de Rakhine, y afirma que no quiere negociar con terroristas.

El Arakan Rohingya Salvation Army (ARSA) ha anunciado la tregua a través de su cuenta de Twitter, invitando a los operadores humanitarios a retomar la asistencia a “todas las víctimas de la crisis, prescindiendo de su etnia o religión”, durante un período que se extenderá hasta el 9 de octubre. Asimismo, en el comunicado se invita a las autoridades a “aceptar esta pausa humanitaria” en los combates.

El 25 de agosto pasado, cientos de militantes del ARSA, localmente conocido como el Harakah al-Yaqin (Movimiento de la Fe), han lanzado una serie de ataques coordinados sobre cerca de 30 puestos de policía y del ejército en el norte del Estado de Rakhine. La contraofensiva de las fuerzas de seguridad birmanas ha provocado el éxodo de cerca de 300.000 Rohinyás rumbo al Bangladesh, en tanto los desplazados entre los grupos étnicos suman aproximadamente 30.000.

Los refugiados Rohinyás que se encuentran en Bangladesh afirman que, durante la represión, las fuerzas del gobierno y los budistas de Rakhine han matado a los habitantes de sus pueblos sin hacer distinción, incendiando cientos de casas. Sin embargo, los grupos étnicos acusan a los musulmanes de perpetrar atrocidades contra su pueblo, mientras que el gobierno afirma que los Rohinyás que huyeron prendieron fuego a sus propias casas para fomentar el miedo y la ira contra el Estado.

Las autoridades y el ejército de Myanmar no han respondido de manera oficial a la declaración de tregua difundida por el ARSA. No obstante, el vocero de la líder birmana Aung San Suu Kyi ha declarado en Twitter: “No negociamos con terroristas”.

El gobierno de Myanmar afirma que sus fuerzas de seguridad están combatiendo un legítima campaña contra “terroristas bengalíes”, responsables de una serie de ataques contra la policía y el ejército en el pasado mes de octubre. El ejército revela que hasta el momento se ha dado muerte a unos 400 militantes, en tanto algunos refugiados Rohinyás denuncian que han sido forzados a combatir en las filas del ARSA.