Punjab, nuevo centro de salud materno infantil en nombre de Shabhaz Bhatti

La iniciativa solidaria está promovida por la asociación que continúa el compromiso del ministro cristiano asesinado en 2011. Se realizó con el apoyo de la diócesis italiana de Treviso en el pueblo de Khushpur. Su hermano Paul Bhatti: "El 2022 con las consecuencias del Covid, la inundación y la crisis política en el país está haciendo que los pobres en Pakistán sean cada vez más pobres".

Treviso (AsiaNews) - En el pueblo de Khushpur, en el distrito pakistaní de Faisalabad, se inauguró un nuevo centro de salud materno-infantil en nombre de Shahbaz Bhatti, ex ministro de la minoría cristiana asesinado el 2 de marzo de 2011. El proyecto se inició para proporcionar un centro de salud en una zona que se encuentra lejos de los hospitales y, por tanto, carece de una atención eficaz. El centro está diseñado para acoger y acompañar a mujeres embarazadas sin distinciones étnicas o religiosas.

El proyecto fue realizado por la asociación italiana Missione Shahbaz Bhatti, entre cuyos miembros fundadores se encuentra la diócesis de Treviso. Esta financió el centro con importantes donativos que se recaudaron, particularmente, con motivo de la ordenación del obispo de Vicenza, monseñor Giuliano Brugnotto, nacido en la diócesis.

En Pakistán, Shabhaz Bhatti fue el primer católico que ejerció de ministro, y trabajó por la justicia social y contra la ley de la blasfemia, que a menudo se usa contra los cristianos en un país predominantemente musulmán. Bhatti también dedicó mucho esfuerzo al caso de Asia Bibi, la mujer cristiana condenada a muerte justamente por blasfemia, que no fue liberada hasta 2018 después de nueve años en prisión.

La Misión Shabhaz Bhatti es una entidad en la que está implicado personalmente Paul Bhatti, hermano del ministro asesinado, que después de haber emprendido muchas batallas con él en Pakistán, ahora es médico en Treviso. Hoy, la asociación está implicada en proyectos de diálogo interreligioso y educación, en la promoción del desarrollo rural y artesanal que presta ayuda a las familias más pobres, dando así voz a las clases más vulnerables que a menudo son víctimas de la violación de sus derechos fundamentales. Hoy cuenta con siete oficinas en distintos puntos de Pakistán: Islamabad, Lahore, Peshawar, Faisalabad, Multan, Quetta y Karachi.

"En Khushpur, con los fondos de Treviso se compraron algunos instrumentos básicos, como una máquina de anestesia y un generador eléctrico, y se contribuyó a la adquisición de una ambulancia", explicó el Dr. Bhatti. "Se contrató a una ginecóloga, cuatro enfermeros, dos auxiliares de quirófano y otro personal técnico. Tenemos una colaboración con la Universidad de Faisalabad, que imparte pequeños cursos de formación para matronas y, en caso de urgencia, recibe a nuestras pacientes. El objetivo es sostener económicamente el Centro durante tres años, y después hacerlo autónomo con los ingresos que se obtengan del pago de determinados exámenes y visitas de especialistas".

El Centro se esfuerza por estar abierto a todos, sobre todo en la grave situación que atraviesa actualmente Pakistán: "El año 2022 -relata Paul Bhatti- dejó graves secuelas post-Covid en toda la población pakistaní, especialmente en los pobres, como los pertenecientes a minorías religiosas, que han sufrido daños irreparables. A esto hay que añadir las inundaciones sin precedentes que asolaron Pakistán en agosto, causando numerosas víctimas y dejando a miles de personas sin hogar y sin trabajo. A esto se añade una grave inestabilidad política en el país, que reduce progresivamente los recursos económicos y está volviendo a los pobres cada vez más pobres".