Prostitución y trabajos forzados: la trata de seres humanos en Bangladesh

de Sumon Corraya

El país asiático es ya fuente y lugar de tránsito de víctimas. Los casos de mujeres y niños son los más documentados, pero también algunos hombres están involucrados. Los varones caen en la mafia a menos de 10 años, las mujeres entre los 11 y 16. Una parte de los traficados está destinada a los países del Golfo. El trabajo de Bangladesh.

Dhaka (AsiaNews)- Niñas y niños de 8 años son obligados a prostituirse; adolescentes de 15 años embutidos de esteroides para aparecer como más "atrayentes" a los ojos de los clientes del burdel en el cual están segregados; muchachas extranjeras "estacionadas" en espera de ser vendidas a otros países. Bangladesh, un país pequeño pero con más de 165 millones de habitantes, es ya "fuente" como también lugar de tránsito de víctimas del tráfico de seres humanos vendidos a otros países de Asia meridional. Juliet Lipca Sarker, coordinador de la división Recursos humanos y género de caritas Bangladesh, explica a AsiaNews: "La trata de mujeres y niños por lo más empleados en el mercado de la prostitución, es más difundida, pero escasamente difundida y denunciada". En general, los varones son empelados en trabajos forzados; obligados a trabajos forzados; obligados a acciones criminales como el tráfico de droga; pornografía; venta de órganos.

Prostitución y trabajos forzados son sectores principales en los cuales de declina la trata de personas en Bangladesh. Según el Center for Women and Child Studies, los niños que caen en la trata tienen menos de 10 años, mientras que las niñas entre 11 y 16. Sin embargo no es raro que menores de 8 años sean obligados a ser esclavos sexuales, segregados en burdeles o casas de placer.

Jóvenes y adultos de Bangladesh que son traficados dentro del país son destinados fundamentalmente a la explotación sexual u obligados a situaciones de esclavitud como el mendigar. En algunos casos, son los padres- que vienen de una extrema pobreza- que venden a sus propios hijos a este mercado; en otros las víctimas son llevadas a la mafia con el engaño o la coerción física.

Muchos propietarios de burdeles o protectores obligan a los adolescentes a tomar anabolizantes o esteroides para aparecer más "apetecibles" para los clientes. Los efectos secundarios son devastadores para sus físicos y pueden llevar hasta la muerte. Según datos oficiales, el 90% de las muchachas entre los 15 y 35 años asume estos asteroides, que crean dependencia hacen también difícil interrumpir la asunción o consumo.

Bangladesh es también un nudo importante en la "red comercial" que une Asia meridional a la región del Golfo. En los últimos años, diversos estudios han confirmado que los traficantes de seres humanos (hindúes y de Bangladesh) usan zonas de tránsito esparcidas en 16 distritos meridionales y occidentales del país para conducir sus rácket . La ruta principal es la Dhaka-Karachi-Dubai. Una parte de las víctimas, en general mujeres y niños, se trafica entre India y Paquistán para el mercado de la prostitución. Otra, en general hombres y mujeres disponibles a emigrar a los países del Golfo en busca de trabajo, se encuentra luego en situaciones de trabajo forzado: los documentos son secuestrados, no tienen libertad de movimiento, no perciben salarios y sufren abusos físicos y sexuales por los propios patrones de trabajo.

Por Bangladesh pasa también un cierto número de mujeres birmanas víctimas de la trata. En general son refugiados de etnia Rohingya.

Desde 2002 al 2011, caritas Bangladesh condujo una serie de proyectos (con caducidad trienal) dirigidoas a la sensibilización de la sociedad sobre el tráfico humano, para buscar de activar una actividad de prevención, además que de salvataje de las víctimas. En el conducir estos programas, la asociación católica se convirtió de vez en vez apoyada a partner locales, como la Ong Mukti Nari- "O"- Shishu Unnayan Sangstha y extranjeros, como Caritas Australia.