Política 'cero-Covid' de Xi: crece el descontento

de John Ai

Crecimiento económico del 4,8% en el primer trimestre; desempleo del 6% en marzo, el más alto desde 2018. En vísperas del 20º Congreso del Partido Comunista, la línea del presidente chino no cambia. Los confinamientos desencadenan protestas en las ciudades. Las empresas luchan por sobrevivir.

Roma (AsiaNews) - El Departamento Nacional de Estadísticas informó que en en el primer trimestre de 2022 la economía china creció un 4,8% en un año, mientras que en marzo la tasa de desempleo en 31 grandes ciudades subió al 6%, la más alta que se registra desde 2018. Los confinamientos para impedir la difusión del Covid-19 que se adoptaron en diversos lugares de China podrían frustar los objetivos económicos del gobierno, que ha fijado un aumento del PIB del 5,5% para fin de año.

El crecimiento en el período enero-marzo superó las expectativas de los economistas, pero la mayoría de los aumentos se produjo en los dos primeros meses. Shenzhen y Shanghái, dos polos financieros e industriales, han vivido confinamientos rígidos: en Shanghái sigue vigente la rígida política contra el Covid. La variante Omicron sigue propagándose, y varias ciudades chinas han impuesto confinamientos y restringido los desplazamientos. Con este panorama, se esperan estadísticas peores para abril.

Zhiwei Zhang, economista jefe de Pinpoint Asset Management, dijo que "el problema del desempleo en las grandes ciudades es más grave que cuando estalló la pandemia en 2020". Uno de los desafíos será proporcionar empleo a los nuevos graduados; este año habrá 10,8 millones, según el Ministerio de Educación.

Sin embargo, el gobierno chino sigue ateniéndose a la política de "cero-Covid" del presidente Xi Jinping. El Diario del Pueblo, la voz del Partido Comunista de China (PCCh), recomendó a la población que apoye la elección de Xi, a pesar de que ha tenido graves consecuencias en la vida social y la economía. La prensa oficial china considera que la práctica de estos dos años ha demostrado que el enfoque sanitario del gobierno es "correcto y eficaz".

En vísperas del XX Congreso del PCCh, que se celebrará en otoño, el éxito de la línea cero-Covid ha cobrado importancia política. Ma Xiaowei, director de la Comisión Nacional de Salud, escribió en Study Times, el periódico de la Escuela Central del Partido, que se deben contrarrestar las falsas opiniones sobre la coexistencia con el virus. Se espera que el Congreso otorgue a Xi un histórico tercer mandato como líder supremo.

El confinamiento en Shanghái comenzó a fines de marzo y las autoridades todavía no han proporcionado una fecha para su finalización. Los efectos del rígido aislamiento se hacen sentir: las personas que padecen enfermedades crónicas no reciben tratamiento médico; los ancianos no reciben la atención que necesitan. La realidad es que casi todo el personal médico de Shanghái ha sido asignado a la lucha contra el covid.

La población está preocupada por el aislamiento prolongado y la ira va en aumento. Además de la falta de alimentos y artículos de primera necesidad, las personas se ven obligadas a permanecer en cuarentena en hospitales temporales y en instalaciones designadas por las autoridades. Las publicaciones en las redes sociales se quejan de las duras condiciones de las instalaciones, como la falta de agua caliente, los baños sin agua para limpiar el inodoro e incluso los niños y bebés que están en cuarentena sin la presencia de sus padres.

Las protestas crecen y las autoridades han intervenido para silenciar la disidencia. Hasta la primera frase del himno nacional chino, "Levantaos, los que rehusáis ser esclavos", está censurada en las redes sociales. Los videos en las redes sociales muestran a los residentes gritando a la policía, exigiendo que termine el confinamiento. En algunos barrios de Shanghái se han producido enfrentamientos entre manifestantes y policías. En Zhangjiang las autoridades se apoderaron de un apartamento, lo que provocó las protestas de los residentes. Los videos muestran que la policía dispersó por la fuerza a los manifestantes.

Las autoridades de Shanghái han publicado una lista de 666 empresas que están autorizadas a operar en un "circuito cerrado", obligando a todos los trabajadores a permanecer en las fábricas sin poder regresar a sus hogares. La falta de personal y de materia prima, así como los problemas de logística, dificultan la recuperación de las actividades productivas.

La Cámara de Comercio de la Unión Europea en China escribió al Consejo de Estado chino para instar a las autoridades a cambiar la estricta política de cero-Covid. Shuichi Akamatsu, cónsul general de Japón en Shanghái, escribió por su parte a Zong Ming, vice alcalde de Shanghái, expresando su preocupación por las dificultades que enfrentan las empresas japonesas. Akamatsu señaló que si no hay cambios, las empresas japonesas tendrán que trasladar la producción a otras provincias de China o fuera del país.

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