Patriarcas y líderes religiosos cristianos de Jerusalén. La Pascua traiga la paz a la región

En el tradicional mensaje pascual, todos los líderes cristianos de Tierra Santa subrayan que la verdadera paz "florece bajo la cruz y es defendida por la Resurrección". No lleva a discriminaciones entre las comunidades o a enfrentamientos interminables". Un pedido a los fieles y "a todos los hombres de buena voluntad" para que se rece por una resolución de los conflictos en curso.

Jerusalén (AsiaNews)- La Resurrección de Cristo "nos asegura y confirma que una transformación a través de la gracia de Dios es siempre posible, hasta en las situaciones humanas que parecen menos manejables. Aquí estamos conscientes de la violencia en curso en lugares como Siria y Líbano, así como del drama de los innumerables miles de refugiados que fueron obligados a abandonar sus propias casas. Pero la Pascua ¡trae la esperanza de paz!. Lo escriben los Patriarcas y los jefes de las Iglesias cristianas en Tierra Santa en el tradicional mensaje pascual.

En el texto, los líderes cristianos de cada denominación agradecen a las Iglesias y a las organizaciones eclesiásticas que dan apoyo a las poblaciones golpeadas por los conflictos- una ayuda "realmente muy apreciado"- pero sobre todo invitan a los gobernantes de la región a aprovechar de la Pascua como verdadero movimiento de paz: "Apelamos a todos: cristianos, fieles de otras religiones, hombres de buena voluntad". Recen con honestidad para que el proceso de paz en curso en Tierra santa, pueda llegar a un resultado positivo y que esto pueda alcanzar a todo el mundo"

No obstante las agudas dificultades de la situación actual, escriben además los jefes de las Iglesias: "Invitamos con urgencia a todas las partes involucradas a aprovechar de esta oportunidad histórica. Una paz que no trate de abolir la discriminación entre las diversas comunidades no es una verdadera paz. Para ser reales, la paz debe abrazar la justicia y el deseo de reconciliación. Reconciliación entre Dios y la humanidad y reconciliación entre las personas que se contratan unas con otras. Esta reconciliación florece en la Cruz y es defendida por la resurrección. Pueda este período pascual traer la alegría y paz a todos los pueblos. ¡Cristo resucitó! ¡Alleluia!