Patriarcado caldeo: solidarios con el pueblo, rezamos por un Irak estable y unido

La represión violenta de las protestas anti-gubernamentales causaron al menos 149 muertos. Una comisión de investigación denuncia el uso de francotiradores que han herido en el rostro y en el pecho a los manifestantes. Temores de nuevas violencias el 25 de octubre. Iglesia iraquí: respetar el derecho a la protesta, evitando toda forma de violencia.

Bagdad (AsiaNews) - “Nos apelamos a la conciencia de los responsables del gobierno del país” para que escuchen “los pedidos” de un pueblo que se lamenta por una “situación mísera” caracterizada por “un empeoramiento de los servicios” y la “difundida corrupción”. Es cuanto afirma en una nota enviada a AsiaNews, el patriarcado caldeo que sigue de cerca la situación de “crisis” en acto en el país y que, en los próximos días, podría originar nuevas violencias. “Desde el inicio de las manifestaciones, el 1° de octubre- prosigue el documento-nuestra iglesias rezan por la restauración y la estabilidad de la nación y seguiremos de cerca las protestas que se realizarán el próximo viernes 25 de octubre”.

Una comisión de investigación promovida por el gobierno iraquí sobre la violenta represión de las protestas populares, caracterizadas por un uso excesivo de la fuerza, habla de al menos de 140 personas muertas. El 70% de las víctimas fue causado por los disparos de proyectiles que han centrado el rostro o el pecho, con toda probabilidad disparados por francotiradores apostados en los techos y en los edificios del centro de Bagdad.

Un particular que evidencia, una vez más, las responsabilidades de los altos oficiales de comando y de los servicios de seguridad, sin embargo, la comisión “justifican” al Premier, Adel Abdul Mahdi subrayando que él no habría impartido la orden de abrir el fuego.

“Oficiales y comandantes-se lee en el informe- perdieron el control sobre el uso de la fuerza durante las protestas” contra la desocupación, penuria en los servicios públicos y la corrupción, contribuyendo en alimentar “una situación de caos”. Además, no habría habido ninguna “orden oficial” por parte de la “autoridades supremas” de utilizar “proyectiles y municiones verdaderas”.

El Premier iraquí sostuvo en primera persona el nacimiento de la Comisión de investigación y prometió una remodelación del gobierno y nuevas reformas, entre las cuales decisiones mirados para contrarrestar la corrupción y aumentar los puestos de trabajo, sobre todo para los jóvenes. Sin embargo, según los críticos se trata sólo de promesas de fachada y no serán suficientes para aplacar la ira popular.

“Por primera vez desde 2003- subraya el patriarcado caldeo- los manifestantes expresaron sus reivindicaciones en modo pacífico y lejano de todo tipo de politización, rompiendo las barreras confesionales y enfatizando la común identidad iraquí”. Por esto. la Iglesia “es solidaria con nuestro pueblo, sensible al dolor y cercana a la realización de las aspiraciones por un futuro mejor”. Al mismo tiempo invita a promover “manifestaciones pacíficas y civiles”, respetuosos del bien público y evitando toda forma de abuso, así como las autoridades deben respetar el “derecho” de la población a demostrar “evitando toda forma de violencia”.

“Este es el momento de afrontar en modo responsable los problemas acumulados”. concluye la nota patriarcal, entablando “un diálogo serio” y buscando “personas serias, conocidas por su honestidad y amor por la patria” a las cuales confiar la tarea de “gestionar los negocios de Irak”.