Patriarca caldeo: un pastor para Teherán por los ‘múltiples desafíos’ de los cristianos iraníes

El Card. Sako difundió un mensaje para la comunidad caldea de la capital, que espera con confianza a un obispo. Emigración, embargo y emergencia coronavirus los temas de mayor urgencia. La fuerza de la comunidad “está en su fe y en la esperanza”. Se necesita un “clero local que conozca a las personas, la cultura y la lengua”.

Bagdad (AsiaNews) - Los cristianos en Irán deben afrontar “múltiples desafíos”. El primero de los cuales es “la emigración: hace un tiempo había 15 mil caldeos” en la República islámica, ahora “son solamente 4 mil entre Teherán y Urmia y el dato es preocupante”. Es cuanto subraya a AsiaNews, el primado caldeo, el Card. Louis Raphael Sako, que en el sitio del patriarcado publicó un mensaje dirigido a la comunidad de la capital. Para frenar el éxodo y reforzar la realidad local, continúa el purpurado, “necesitamos un clero local que conozca a las personas, la cultura y la lengua” reforzando mientras tanto “las vocaciones, que son pocas”.

Entre las prioridades que hay que afrontar está “el nombramiento de un obispo para Teherán”. En el pasado Sínodo, recuerda, “hemos presentado 2 nombres, pero ambos han retirado sus candidaturas”. “Debemos buscar-prosigue el primado-personas idóneas, que conozcan la lengua, el país. Hasta hoy hay solo 3 curas iraníes”.

La pandemia de Covid-19 y las sanciones internacionales han causado pesadísimas repercusiones sobre la economía de la República islámica que, de reflejo, se abatieron sobre la población civil, comprendidos los cristianos unidos en el sufrimiento a musulmanes y hebreos. “El coronavirus- admite el Card. Sako-complicó la situación, porque las fronteras están cerradas es casi imposible obtener la visa para viajar. Esperamos con confianza el próximo Sínodo, cuando todo habrá vuelto a la normalidad proveeremos a nombrar un administrador patriarcal” para Teherán.

Al nuevo obispo, subraya el patriarca caldeo, le tocará la tarea de “animar las vocaciones sacerdotales y religiosas, colaborar con las religiosas presentes, reforzar el compromiso en el ámbito, educativo con las escuelas ya presentes, apoyar las actividades entre las cuales las casas para ancianos”. En Irán hay libertad religiosa, confirma el cardenal. “pero el embargo pesa mucho ya sea a nivel económico como social. Nosotros iraquíes lo sabemos muy bien, por haberlo experimentado 12 años sobre nuestra piel”.

Los cristianos, como el resto de la población, “sienten mucho aislamiento” por esto “debemos pensar en ellos como pueblo”. Su fuerza,concluye, “deriva de su fe, por el vínculo con el Evangelio que para ellos representa un tesoro. Su fe es profunda y es el signo más tangible de esperanza, la solución llegará, es necesario sólo esperar y rezar”.

A continuación reportamos el mensaje del Card. Sako a la diócesis caldea de Teherán:

Queridísimos padres, religiosas, hijos e hijas de la bendita diócesis de Teherán, gracias a vosotros y paz de Dios Padre nuestro y del Señor Jesucristo (1Cor 1,3). Comprendo vuestra difícil situación, en los términos del costo de la vida y de las condiciones de salud a causa del bloqueo (embargo) que es impuesto contra vuestro país. Es por esto, que es aún más apreciada vuestra fe y vuestro compromiso; les renuevo la invitación a colaborar trabajando juntos, como si fueran un solo equipo, en una óptica de unidad, honestidad en el servicio recíproco y bajo el servicio mutuo y en nombre del amor incondicional. Rezamos por vosotros, en la esperanza que puedan volver a una vida normal, apenas será pasada esta “tempestad”.

Al mismo tiempo, cada uno de vosotros es responsable (de la vida de comunidad), hasta el próximo Sínodo y a la elección de un nuevo obispo con autoridad, que esté en grado de estar a vuestro servicio en nombre de la humildad, del amor y de la imparcialidad.

Al mismo tiempo, pedí al nuncio apostólico en Irán, Mons. Leo Boccardi que les esté cerca y los ayude a superar todos los problemas

Por lo que me toca, estén bien seguros que continuaré siguiendo la situación de la diócesis de Teherán y de estar a vuestro servicio por cuanto me sea posible.

Puedan estar siempre estar siempre bajo el cuidado y la protección de Dios.

Unidos en Cristo.

Cardenal Louis Raphael Sako

Patriarca de la Iglesia caldea