El viaje apostólico es un patrimonio de intercambios y experiencias que ayudarán a devolver a la nación al "escenario internacional". El cardenal traza las directrices para el turismo, el diálogo, la unidad y el diálogo interreligioso. La importancia del turismo para contribuir a la reactivación económica, valorizando el patrimonio cristiano, musulmán, yazidí, sabeo y judío.

 

Bagdad (AsiaNews) - Reactivar el turismo, fortalecer el diálogo, consolidar la unidad nacional y continuar en el camino del diálogo interreligioso entre las diversas almas de la nación. Estos son algunos de los puntos que señala el patriarca caldeo, cardenal Louis Raphael Sako, en una carta dirigida a los iraquíes (cristianos y musulmanes) y a los pueblos de la región de Oriente Medio, para mantener vivo el legado del "histórico y fundamental" viaje apostólico del Papa Francisco a Irak. Un patrimonio de intercambios y experiencias, como explica a AsiaNews, para "devolver el país a una situación de normalidad y al escenario internacional", sobre el cual se publicará un libro con fotos, documentos y testimonios.

Desde el encuentro con el líder chiíta al-Sistani en Najaf, hasta el que mantuvo con el clero y políticos católicos en Bagdad, pasando por la visita a Mosul y Nínive y el encuentro interreligioso en Ur de los Caldeos, fueron muchos los momentos significativos que caracterizaron los días del Pontífice en Irak. Es una oportunidad, explica Card. Sako, para "cerrar la página de un pasado doloroso" e instaurar una "cultura de paz, fraternidad, solidaridad y respeto" que rechace de una vez para siempre "el odio, las disputas sectarias y los conflictos".

La carta del primado caldeo contiene reflexiones válidas para todos los iraquíes, independientemente de la etnia y la religión que profesen, y que fueron discutidas con el presidente de la República, ministros y autoridades religiosas. Es una exhortación a los pueblos y gobiernos de Oriente Medio para que superen una lógica sectaria y partidista que a lo largo de los años ha fomentado la violencia, la destrucción y la división. En este marco se inserta la iniciativa del cardenal Sako de crear una "comisión eclesial" para "estudiar las implicaciones de la visita, los lugares y las personas que conoció, los mensajes que dirigió" y, sobre todo, "qué se puede hacer para pasar a la acción. Una comisión -añade- abierta a otras Iglesias y a colaborar con organismos oficiales y religiosos”.

Una nueva etapa en la vida de Irak pasa por "un cambio en la mentalidad de las personas". Es la idea que puso de relieve el Pontífice en Nayaf y en Ur: "somos hermanos y debemos tratarnos como hermanos". El cardenal Sako recuerda que también comparte esa posición el gran ayatolá Ali al-Sistani, quien dijo que los cristianos "son parte de nosotros y nosotros [los musulmanes] somos parte de ustedes". “Para combatir el virus del terrorismo y el extremismo - afirma el cardenal - proponemos organizar cursos y talleres mixtos de formación, promoviendo el conocimiento de las religiones y corrigiendo los elementos que provocan la desinformación” y obstaculizan el “respeto a la diversidad”.

Uno de los primeros proyectos, es publicar un estudio en árabe e inglés sobre las religiones, elaborado por la Comisión para el Diálogo (en el que hay cristianos, musulmanes sunitas y chiítas, un yazidi y algunos sabeo-mandeses) para "consolidar el principio de igualdad ante la ley". La iniciativa también quiere promover "planes de estudio en las escuelas" diseñados según la edad, para sensibilizar sobre el tema de la fraternidad y "consolidar la unidad nacional" a través de la educación y la instrucción.

En el plano económico, el primado caldeo considera que uno de los primeros pasos es "reactivar el turismo", porque "Irak es un gran museo de las civilizaciones sumeria, babilónica, caldea, asiria, cristiana y musulmana". Con esto en mente, debemos trabajar para "restaurar y conservar los sitios arqueológicos y conectarlos con las instalaciones turísticas", ampliando su campo de agregación para que puedan incluir elementos cristianos, islámicos, mandeos, yazidíes y judíos. Entre los sitios cristianos señala la iglesia de Kochi, en las afueras de Bagdad, que data del siglo I d.C., la iglesia de al-Aqis del siglo V en Kerbala y la iglesia verde del siglo VII en Tikrit. "Estos monumentos -dice- deberían considerarse parte integral del patrimonio iraquí unificado" y son "mucho más preciosos que los pozos de petróleo, que algún día se habrán agotado".

Por últimmo el cardenal Sako alienta a "los iraquíes expatriados a invertir en su país de origen" y propone establecer un día nacional para celebrar la visita del Papa a Irak. El Consejo de Ministros, por su parte, anunció que el 6 de marzo se celebrará el Día de la Tolerancia, en el cual se realizarán iniciativas y actividades que "contribuyan a difundir una cultura de la tolerancia y el amor".