Patriarca caldeo: En Irak en acción una "catástrofe humanitaria", urge una intervención
Bagdad (AsiaNews) - Las fuerzas peshmerga
kurdas, respaldados por los ataques aéreos de Estados Unidos, han lanzado una
nueva ofensiva contra la milicia del Estado Islámico en Kirkuk, una ciudad del
norte de Irak, rica en petróleo y de importancia estratégica. Los peshmerga
están avanzando desde el sur-oeste hacia el centro, para aplastar a las
milicias yihadistas que, en las últimas semanas, habían llevado a cabo
numerosos ataques en la zona y en toda la provincia.
Los islamistas también han enviado nuevos combatientes a la ciudad de Tikrit,
en un intento de detener el avance del ejército y las milicias chiíes iraquíes,
por día se dedican a la ofensiva para recapturar la ciudad natal del ex
dictador Saddam Hussein. Por esto varias yihadistas han dejado Mosul, un
bastión del Estado Islámico, en la dirección de Tikrit.
En una situación de continua violencia y
terror, empeoran las condiciones de la población civil iraquí, rehén de
un conflicto sangriento y de resultado cada vez más incierto. Las llamadas del
patriarca caldeo al gobierno iraquí y la comunidad internacional, denunciando
una "catástrofe humanitaria" que "no pueden permanecer en
silencio". Mar Sako invoca una reunión urgente del Gobierno y el
Parlamento, para discutir la situación actual e implementar las acciones
necesarias para hacer frente a una realidad que "es probable que vaya de
mal en peor".
Aquí, a continuación, la llamada del
patriarcado caldeo enviado a AsiaNews:
El Patriarcado caldeo expresa su más profunda preocupación por la situación de
la población y de los civiles inocentes, que se encuentran dentro de las
diferentes áreas del teatro de conflicto en la región. El llamado "cuerpo
del Estado Islámico" está a punto de prender fuego a todo: los seres
humanos, las piedras y la civilización.
En el lado opuesto, el ejército iraquí ha movilizado a las masas a través de la
creación de una fuerza armada de forma voluntaria (Alhashed Alsha'bi) y está a
punto de liberar las zonas ocupadas. Todo esto implica, como consecuencia, el
desarraigo de miles de familias y su migración hacia lo desconocido, hacia un
futuro incierto, sin haber sido establecer un plan claro para traerlos alivio.
Dicho esto, lanzamos un fuerte llamado al gobierno central del país y la
comunidad internacional a tomar medidas tan pronto como sea posible con el fin
de proteger a los civiles inocentes y ofrecerles la ayuda necesaria en términos
de alojamiento, alimentos y agua, la medicina; al mismo tiempo que necesita
para cuidar de los miles de estudiantes de universidades y escuelas.
Como cristianos, nosotros mismos hemos experimentado esta tragedia durante la
deportación de nuestro pueblo desde Mosul y las ciudades de la llanura de
Nínive; el nuestro es un sufrimiento que sigue, porque hoy estamos lejos de
nuestros hogares y de nuestra tierra.
Es, por supuesto, una catástrofe humanitaria que ciertamente no puede pasar en
silencio. Esta situación, continuando perdurando en el tiempo, cada vez será
más difícil de manejar y tendrá un impacto negativo y consecuencias trágicas y
desastrosas en el largo plazo.
Por esto lanzamos nuestro apremiante llamamiento al Consejo de Ministros y a la Cámara de Representantes para
que consideren seriamente la posibilidad de una reunión especial para discutir
en profundidad la situación que es probable que vaya de mal en peor.
* Patriarca de Babilonia de los Caldeos y
Presidente de la
Conferencia Episcopal de Irak.
03/04/2017 14:24
05/04/2016 15:14