Patriarca Sako: el ministerio de lectores con 40 hombres y mujeres es un signo de una Iglesia iraquí viva

Ayer, en la Catedral de San José, en Bagdad, 40 hombres y mujeres recibieron el ministerio de lectores. El Patriarca caldeo subraya la atención a la mujer en la comunidad. Mons. Yaldo: estuvieron presentes más de 600 personas "en un clima de serenidad y compartición". Una celebración que sigue la estela de los eventos por el Año de la Misericordia.

Bagdad (AsiaNews) - "El ministerio del lectorado para 40 hombres y mujeres es un momento de gran celebración para la Iglesia caldea. Una comunidad de vida, de ambos sexos. Por otro lado, el papa Francesco ha dicho también en estos días que no debemos marginar a las mujeres, sino darles más atención, y lo hemos escuchado". Con estas palabras, llenas de emoción y diversión, el patriarca caldeo Mar Louis Rafael Sako ha comentado la celebración que tuvo lugar ayer por la mañana en la catedral caldea de San José, en Bagdad. Un evento que confirma la vitalidad de la comunidad cristiana de Irak, a pesar de la persecución, la violencia y el éxodo de los fieles que, en pocos años, vio reducido su número a la mitad.

Cientos de fieles colmaron la catedral ayer por la mañana para asistir a la ceremonia; tras la celebración de la Divina Liturgia, presidida por Su Beatitud Mar Sako, con los obispos auxiliares Shlemon Warduni y Basilio Yaldo y muchos sacerdotes de la diócesis.

El servicio de lector, explicaron los concelebrantes, tiene sus raíces en el Nuevo Testamento y en la tradición de la Iglesia en sus albores; es un servicio de "primer nivel" para animar la vida de la comunidad parroquial y fortalecer la unidad de la Iglesia y sus miembros.

En el contexto de la celebración, el patriarca caldeo instó a los cristianos activos en la política para formar una lista única que pueda ser un punto de referencia y fuente de fortaleza para las próximas elecciones. Él pidió a todos que se comprometan en proporcionar apoyo práctico a la Liga caldea, instrumento de acción política y social (sin llegar a ser un partido) de los cristianos en sus tierras de origen.

Después de la misa, AsiaNews obtuvo también un comentario del obispo auxiliar - y brazo derecho del patriarca - , Mons. Basilio Yaldo, que habló de "gran fiesta, con una iglesia abarrotada en todo lugar, fieles de pie y otros afuera" en la plaza, pero "ellos querían testimoniar su presencia". No sólo estaban los familiares y parientes de los nuevos diáconos, sino "más de 600 personas en representación de toda la comunidad cristiana" de la capital, "en un clima de serenidad y compartición", desafiando los riesgos e inseguridades.

"La concesión de estos ministerios - continúa el prelado - nos da esperanza, porque es un signo de una Iglesia que está viva, plena de fieles. En Bagdad, hay muchas cosas en contra de los cristianos, esta celebración nos da esperanza". "Este – concluye el obispo auxiliar - es uno de los eventos que hemos planeado para este año jubilar, porque es un signo de la misericordia; antes fue la apertura de la Puerta Santa en una campamento situado aquí, en la capital, y en las próximas semanas habrá peregrinaciones en diversos lugares. Somos una Iglesia viva".