Papa: los religiosos continúan su renovación "espiritual, carismático e institucional"
Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - El camino hacia adelante en la renovación
"espiritual, carismática e institucional" de las familias religiosas, formuladas por el Consejo, dando nueva vida a esos hábitos y aquellas estructuras que,
"en la vida de la Iglesia y,
por tanto, también en la vida consagrada,
reconocemos como mayor
capacidad de respuesta a lo que Dios nos pide hoy para hacer avanzar Su Reino en el mundo: las estructuras que nos
dan falsa protección y afectan el dinamismo de
la caridad; hábitos que nos
llevan lejos de la manada a la
que se envían y nos impiden escuchar el
grito de quienes esperan la Buena
Nueva de Jesucristo". El
Papa Francisco lo pide a los
Institutos de Vida Consagrada y
las Sociedades de Vida Apostólica participantes en
la Reunión Plenaria de la Congregación,
reunida en torno al tema "Vino
nuevo en odres nuevos".
Sólo tomando el ejemplo del tema elegido, dijo el
Papa que después del Concilio Vaticano II "en la parte
de la viña del Señor representado por aquellos que han optado por imitar a Cristo
más de cerca mediante la profesión de los consejos evangélicos, nueva uva ha madurado y vino
nuevo era exprimido. En estos
días - continuó
- os habéis propuesto discernir la calidad y la maduración del vino nuevo que se produce en la larga temporada de renovación, y al mismo tiempo evaluar si las botellas que lo contiene, representado por las formas institucionales
presente hoy en día en la vida consagrada, son adecuadas para contener esta "vino
nuevo" y favorecer su plena madurez".
"Si bien no se ocultan las áreas de debilidad que se pueden encontrar
hoy en la vida consagrada: por ejemplo,
la resistencia de algunos sectores al
cambio, la fuerza disminuida de la atracción, el importante número de
abandonos, - ¡y eso me preocupa! Dice algo sobre
la selección y formación de los
candidatos; luego está el misterio
de cada persona, pero estas dos
cosas primero deben ser evaluadas bien - la fragilidad de ciertas
rutas de formación, la ansiedad de las tareas
institucionales y ministeriales a
costa de la vida espiritual, la difícil
integración de la diversidad cultural
y generacional, un difícil equilibrio
en el ejercicio de la autoridad y
el uso de bienes - ¡me preocupa incluso la
pobreza! Yo hago publicidad
de mi familia, pero San Ignacio dijo que la
pobreza es la madre y también la pared de la
vida consagrada. Es madre de la
pobreza, ya que da la vida,
y la pared protege de lo mundano.
Pensemos en estas debilidades. Queréis seguir escuchando las señales del Espíritu que abre nuevos
horizontes y empuja a nuevos caminos, siempre dividiendo por la norma suprema del Evangelio e inspirado la audacia creativa de sus
fundadores y fundadoras".
"En la difícil tarea que os reúne, a fin de evaluar el vino nuevo y probar
la calidad de los odres que lo deben contener, os
guían algunos criterios rectores orientadores:
la originalidad evangélica de la opción,
la lealtad carismática, la primacía
del servicio, la atención a los más
pequeños y frágiles, el respeto de la
dignidad de cada persona".
"Lleven adelante el camino de renovación
puesto en marcha y en gran parte cumplido en esos cincuenta años, examinando
todo lo nuevo a la luz de la Palabra de Dios, escuchando las necesidades de la
Iglesia y del mundo contemporáneo y utilizando todos los medios que la sabiduría
de la Iglesia pone a disposición para avanzar en el camino de la santidad
personal y comunitaria. Y entre estos medios el más importante es la oración,
también la oración gratuita, la oración de alabanza y de adoración. Nosotros
los consagrados, estamos consagrados para servir al Señor y servir a los otros
con la Palabra del Señor ¿no? Díganles a los nuevos miembros, por favor,
díganles que rezar no es perder tiempo, adorar a Dios no es perder tiempo,
alabar a Dios no es perder tiempo. ¡Si nosotros los consagrados no nos
detenemos cada día ante Dios en la gratuidad de la oración el vino se volverá
vinagre!".
17/12/2016 13:14
02/02/2021 19:17
29/08/2020 11:22